Comienza la huelga contra la privatización de la sanidad
Los principales sindicatos húngaros han convocado una huelga general indefinida para protestar contra el plan de privatización de la seguridad social y de las pensiones más bajas propuesto por el Gobierno del Partido Socialista Húngaro.
Está previsto que los servicios de ferrocarril, autobuses, la sanidad pública y la educación secunden esta huelga. Sin embargo, los representantes sindicales del sector del transporte público en Budapest han anunciado que no habrá paros en su sector.
A pesar de todo, el primer ministro húngaro, Ferenc Gyurcsany, mostró su optimismo con respecto a la aprobación, mañana lunes, de su proposición legislativa en el Parlamento gracias al apoyo de los socialistas y del otro partido que apoya al Gobierno, la Alianza de los Demócratas Libres (ADL).
La política de privatización del sector sanitarios fue clave para la consecución de la alianza entre los socialistas y la ADL, que reclamaba como necesaria la reforma de una sanidad en la que la mayoría de los servicios son gratuitos, pero en la que muchos pacientes pagan “tasas de gratuidad” ilegales a los médicos. Además, argumentan, existe una gran diferencia en la calidad del servicio sanitario entre unas regiones y otras.
Los que se oponen a la reforma, incluido el Colegio de Médicos de Hungría, denuncian que la entrada del sector privado introduciría criterios de rentabilidad que rompería con la tradición de solidaridad social y dejaría sin una cobertura adecuada a las personas con menos recursos.
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