Duro golpe para Obama en las elecciones
que tuvieron lugar ayer en Estados Unidos (y de las que todavía se desconocen los resultados definitivos) podrían cambiar en breve la política seguida por el gobierno de Barack Obama. La más que probable victoria del partido republicano en el Congreso estadounidense no pondrá nada fácil la toma de decisiones del mandatario en el futuro.
Según las últimas informaciones, los republicanos habrían logrado al menos 50 escaños en la Cámara Baja, superando así los 39 necesarios para la mayoría. Sin embargo, esta victoria republicana podría no repetirse en el Senado, donde según las cadenas ABC News y CNN el partido demócrata se habría hecho con la mayoría.
Ante esta posible nueva situación política, el presidente estadounidense se ha mostrado escéptico sobre una posible cooperación con los republicanos tras los comicios y consideró que los términos de la relación entre ambos partidos cambiarán significativamente después de las elecciones.
“Yo espero cooperar con los republicanos, pero la clase de concesiones que vamos a tener que establecer dependerán de quien va a estar al mando del Congreso”, indicó Obama en una entrevista concedida a una emisora de radio de Chicago.
“Si los republicanos consiguen la Cámara de Representantes, querrán dictar los términos de estas concesiones”, anticipó el presidente.
“Significa que harán retroceder la reforma sanitaria, como han advertido, y que harán retroceder la reforma financiera, como también han advertido. Ese va a ser su propósito”, aseveró en declaraciones recogidas por la Web estadounidense Politico.
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