En pie de huelga

Se han convertido en los protagonistas del día de hoy muy a su pesar. Los funcionarios, jubilados y futuras madres han sido las 'víctimas' del decreto ley del Gobierno central que reduce el sueldo de los empleados públicos un 5% de media, congela las pensiones de jubilación y anula el 'cheque bebé' que aportaba 2.000 euros por hijo nacido.

En La Rioja hay 14.000 funcionarios públicos: trabajadores de la Administración general y regional, personal sanitario, profesores... que están llamado a esta convocatoria de huelga y son los más beligerantes contra el 'tijeretazo'.

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Funcionario grupo A1 en el Ayuntamiento de Logroño.

“Estoy a favor de reaccionar, pero creo que la huelga no es la medida más interesante” asegura este funcionario de carrera sobre la huelga de 24 horas convocada para la jornada de hoy. Propone como alternativa una huelga 'japonesa' caracterizada por ser más minucioso con la tramitación administrativa y ralentizar trámites, sin faltar al puesto de trabajo ni regalarle a la Administración el dinero como va a ocurrir hoy, señala indignado.

Este funcionario municipal de Logroño pertenece al grupo A1 y prefiere mantenerse en el anonimato. Considera que la Junta de Personal no representa los intereses de su grupo: “nadie se ha manifestado por el recorte salarial de los altos puestos sino por los intereses de los grupos inferiores”. Denuncia que su reducción “es de más del 40 por ciento del salario en la paga extra de diciembre” por lo que ganará “menos que un grupo A2”. Los sindicatos representan a “la masa” grupos C, E, C1, C2 pero consideran que el grupo A1 “está suficientemente bien pagado y no entran al trapo”.

Ante la pregunta de si acudirá a la jornada de huelga, lo tiene claro: “voy a acudir a las 12,30 horas pero lo que no voy a consentir es que encima que me quitan casi 100 euros mensuales, y 500 euros en la paga extra, me quiten más de 100 euros por no ir a trabajar por la huelga”. En su misma situación se encuentran muchos compañeros que no quieren que el Ayuntamiento recaude a costa de sus quejas porque “si vas a la huelga, ese día se lo regalas a la Administración” critica.

Desde el momento del anuncio del recorte salarial ha vivido la experiencia “con mucha indignación” y recuerda que en Logroño el concejal de Economía, Vicente Urquía, ya propuso con anterioridad reducir el sueldo. Bajo su punto de vista el Gobierno no puede 'sacarse' un decreto así: “entiendo que se puede congelar el salario pero lo que no puedes hacer es recortar derechos adquiridos cuando existen negociaciones colectivas, no puedes decir: 'te quito' de lo que ya tienes” asevera.

La opinión pública en ocasiones no entiende la postura de los funcionarios, y este trabajador aclara que “el funcionario no tiene subida salariales como otros colectivos, va siempre a la cola de la empresa privada y lo que ha tenido son pérdida de adquisición (...) la gente cree que eres un privilegiado y tienen la conciencia que el funcionario no trabaja cuando no es así. El funcionario trabaja, porque los servicios públicos funcionan. El funcionario está ahí por superar un proceso selectivo y cobra en función de su responsabilidad y capacitación. A nadie le regalan nada...”.

Otras opciones que considera viables para reducir déficit son acabar con los dispendios sociales que existen como el 'chequebebé'. Asegura que encontrándonos en la situación en la que estamos “¿Por qué se demora su aplicación hasta el 1 de enero de 2011?”. Y sugiere que se deben tomar medidas con las entidades financieras, “que son las culpables de que nos encontramos en esta situación” sentencia.

José María Acerete. 67 años, jubilado.

José María Acerete no hace mucho que ha pasado a engrosar la lista de jubilados de La Rioja. Tiene 67 años y se ha pasado toda la vida en la carretera conduciendo un camión. El decreto del Gobierno central supone para él la pérdida de hasta un 3% de su pensión de jubilación. Confiesa que no le supone mucho a final de mes aunque reconoce que en conjunto sí que significa un ahorro importante para el Estado.

José María asegura que la convocatoria de huelga de hoy no va a servir de mucho. “El Gobierno ya lo tiene todo muy estudiado y muy pensado y saben perfectamente lo que significa una huelga, pero eso a ellos les da igual. Aquí es el ordeno y mando” afirma José María, “socialmente la gente se dará cuenta de lo que está pasando, que ya sabemos que es una cosa de toda Europa. Pero aquí en España no han tenido engañados. Las vacas flacas hace más de un año que empezaron, pero aquí nos han ocultado todo lo que han querido y algo más”.

Este ex camionero está convencido de que la huelga de hoy la van a secundar únicamente los funcionarios y es muy crítico con los sindicatos: “mientras se ha estado diciendo que había 4 millones de parados, los sindicatos no han movido ni un dedo. Ahora que les tocan el bolsillo a ellos, ahora es cuando hacen la huelga, luego entonces ¿qué es lo que quiere decir esto? Que mientras me das pan, llámame perro y burro, es así de claro. Es así”.

Belén Diego. 38 años, embarazada.

Belén está embarazada de seis meses por lo que el Decreto del Gobierno que incluía la supresión del cheque bebé no le afecta. Ella cobrará los 2.000 euros cuando nazca su segundo hijo. Y aunque no considera que el cheque bebé sea un incentivo para la maternidad en España reconoce que ayuda. Por eso no ve con buenos ojos los recortes del Gobierno. “No me parece bien que se baje el sueldo a los trabajadores, sean o no funcionarios. Además con esta bajada de salarios no se incentiva el consumo y no me parece una solución para mejorar la economía y que esté activa” y continúa, “esto ha pasado porque las grandes financieras y empresas han especulado, se han forrado y al final estamos pagando la crisis los que llegamos justitos a final de mes”.

Belén sospecha que la huelga no servirá de nada, pero “los pobres al menos, tenemos derecho a protestar”. Cree que el cheque bebé no es imprescindible pero en su caso “me va a salvar la vida. Hacienda me ha metido un porrazo por la tasación de mi casa y tengo que pagar 4.000 euros. Mi cheque bebé se lo va a llevar Hacienda entero”. De todas formas, Belén no cree que una pareja se anime a tener un hijo por la ayuda del Gobierno, hay otros factores como tener un sueldo fijo, una vivienda o la cercanía del colegio que marcan esa decisión.

Aún así, esta futura mamá asegura que esta ayuda económica no se debía haber otorgado por sistema. “Lo que no puede ser es que estemos las rentas normales las que estamos pagando el pato de todo esto. No todo el mundo necesita 2.000 euros cuando nace un niño, hay gente que va muy sobrada. Ahora se lo van a quitar a gente que lo necesita para pagar Hacienda o el alquiler de tres meses.”