La Barranca contará con un sistema de videovigilancia
La presidenta del Gobierno de La Rioja, Concha Andreu, la consejera de Participación, Cooperación y Derechos Humanos, Raquel Romero, y la responsable del Observatorio de Derechos Humanos, Sara Carreño, han visitado esta mañana el cementerio civil La Barranca, acompañados por el presidente de la Asociación para la Preservación de la Memoria Histórica La Barranca, Ricardo Blanco y el secretario de dicha Asociación, Pedro Barranco.
Tras la visita, la presidenta ha reafirmado el compromiso del Gobierno con “la recuperación de la memoria de las víctimas en La Rioja” y ha querido reconocer el papel de la Asociación de La Barranca por “el trabajo y la contribución realizada, ya que habéis sido los principales impulsores de la recuperación y de la preservación de la memoria de los asesinados y represaliados en La Rioja a raíz de la Guerra Civil española”. “Todas las víctimas merecen reconocimiento y respeto. Estar en paz con nuestro pasado es fundamental para afrontar con garantías el futuro de esta tierra”, ha añadido.
La consejera de Participación, Cooperación y Derechos Humanos ha destacado que La Barranca es “un lugar de justicia, reparación y memoria” y ha asegurado que hablar de memoria “es hablar de un derecho humano”, al tiempo que ha reconocido la labor de la Asociación y ha insistido en que “no debemos olvidar a las víctimas ni su sacrificio por la democracia”.
Nuevo sistema de videovigilancia
El Observatorio de Derechos Humanos ha invertido 15.000 euros en dotar de videovigilancia a este memorial que acoge los restos de más de 400 personas represaliadas por el franquismo al comienzo de la Guerra Civil. El sistema consta de sistema de alarma y videograbación con dos cámaras y se abastece de electricidad mediante placas eléctricas.
Su instalación forma parte del plan de protección y seguridad de este memorial frente a actos antidemocráticos y permitirá evitar episodios vandálicos como los sufridos en los últimos años. El 14 de abril de 2019, coincidiendo con el 87º aniversario de la proclamación de la Segunda República, apareció lleno de pintadas nazis y fascistas y registraba un ataque similar en la misma fecha tres años antes.
La dotación de un sistema de videovigilancia se suma a otras acciones llevadas a cabo por el Observatorio para mejorar las infraestructuras de este lugar, como la mejora de la accesibilidad, el acondicionamiento del entorno, la adquisición de mobiliario y el refuerzo de la estructura del conjunto memorial, cuestiones todas ellas demandadas por la Asociación para la Preservación de la Memoria Histórica La Barranca.
Como próxima acción, el Observatorio de Derechos Humanos está trabajando en el que será uno de sus grandes proyectos de legislatura: el futuro Centro de interpretación para la Recuperación de la Memoria Histórica de La Rioja que estará situado junto al Memorial La Barranca.
Historia del Memorial La Barranca
Situado sobre el barranco de Barrigüelo en el municipio de Lardero, La Barranca es uno de los mayores conjuntos monumentales de España dedicado a preservar la memoria de las víctimas civiles del franquismo. Acoge los restos de las más de 400 personas asesinadas por los franquistas al comienzo de la Guerra Civil, entre el 10 de septiembre y el 15 de diciembre de 1936.
Durante la dictadura franquista, este espacio se mantuvo como lugar de reunión de los familiares de los represaliados hasta que, tras la muerte de Franco, en 1979 este descampado se dignificó con la construcción del cementerio civil La Barranca. El monolito que preside su entrada, obra del escultor Alejandro Rubio Dalmati, es un símbolo de todas las víctimas de la represión franquista en La Rioja.
El Memorial La Barranca forma parte del patrimonio de la Comunidad Autónoma de La Rioja desde 1980 y está gestionado en colaboración con la Asociación para la Asociación para la Preservación de la Memoria Histórica La Barranca, que ofrece visitas guiadas para conocer su historia.
En La Rioja hay 2.006 personas que fueron asesinadas a causa del franquismo por la Guerra Civil, entre ellos 38 mujeres y dos niños de 13 años.
Las viudas de todos los hombres que están aquí vinieron desde el 1 de noviembre de 1939 aquí a velar y a llorar por sus seres queridos. Pese a la represión, ellas no desfallecieron en sus esfuerzos, “ese dicho de que las mujeres son el sexo más débil, estas lo tiraron por tierra”, ha dicho Pedro Barranco. Y añadía que sin ellas, los niños y las familia “no hubieran salido adelante”.
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