Los vecinos de Rivas de Tereso se unen frente a la expropiación del manantial de 'La Cerraja'

La 'guerra del agua' de los vecinos de Rivas de Tereso se encona. Este sábado ha tenido lugar una asamblea popular, “ante la negativa del alcalde de San Vicente de acudir a la convocatoria para informar in situ”, según informan los vecinos de Rivas a través de un comunicado de prensa.

El pasado lunes, los vecinos de Rivas de Tereso, aldea perteneciente al municipio de San Vicente de la Sonsierra, se levantaron “contra la pretensión del alcalde de expropiarles el agua” del manantial de 'La Cerraja', situado en las proximidades de ese núcleo de población, y que ha venido siendo utilizado tradicionalmente por ellos. El alcalde pretende instalar contadores y facturar por un servicio que le es completamente ajeno, algo que lo que los vecinos califican como “prácticas coloniales”.

Según el escrito de este sábado, el Ayuntamiento de San Vicente “se escuda en que citó a los afectados a las dependencias municipales el pasado miércoles” pero ello, continúan, “se hizo de un día para otro, y, así, solo asistió un vecino, quien, además, se negó a firmar la diligencia de comparecencia que el Ayuntamiento le propuso, en un intento de justificar que la información se había proporcionado de forma adecuada y suficiente”.

Los vecinos consideran “significativo” que “ese baldío intento de proporcionar una apariencia de diálogo solo haya tenido lugar una vez trascendiera el enfrentamiento en los medios de comunicación”. En la asamblea de hoy, explican en el comunicado, “se ha puesto de manifiesto la unión vecinal, ante lo que consideran un atropello más por parte del alcalde de San Vicente”.

Según indican, “existe ya un historial de agravios que viene produciéndose desde hace años y que pone de manifiesto que, para el regidor, ellos no son más que un instrumento para engrosar las arcas municipales, sin que exista la más mínima voluntad de prestar unos servicios dignos”. A título de ejemplo, denuncian “el nulo mantenimiento de los caminos rurales, la inexistencia de recogida selectiva de residuos, etc”.

También han decidido iniciar acciones judiciales, “teniendo en cuenta que el expediente de expropiación de la fuente vecinal de La Cerraja se ha seguido con absoluto desprecio a los trámites legalmente exigibles, sobre todo, en lo que hace referencia a la posibilidad de conocer el proyecto y de formular alegaciones, lo que supondría su nulidad, por haberse vulnerado el artículo 24 de la -tan citada estos días- Constitución de 1978”.

Por todo ello, los vecinos afirman “hallarse en una situación de hartazgo y han decidido movilizarse hasta las últimas consecuencias, ante lo que consideran un atropello más y un absoluto desprecio hacia su comunidad”.