Mejor, terapias combinadas
Cuando los pacientes con cáncer de próstata tienen un tumor localizado y reciben los dos tratamientos su pronóstico mejora, según un nuevo estudio del Instituto Dana Farber (Boston, Estados Unidos). La estrategia no ha resultado útil en casos en los que los sujetos padecían además otras enfermedades.
Varios estudios anteriores apuntaban esta posibilidad, pero también advertían que usar la terapia de supresión de andrógenos (AST, por sus siglas en inglés) y radioterapia (RT) aumenta los efectos negativos en personas con otros trastornos (comorbilidades).
Para llegar a esta conclusión, los investigadores llevaron a cabo análisis de 206 hombres con cáncer de próstata localizado pero de mal pronóstico y los dividieron en dos grupos, según padecieran o no algún otro problema de salud. El periodo de seguimiento del grupo fue de más de siete años.
Las tasas de supervivencia fueron significativamente más altas en los pacientes que recibieron tanto RT como AST, comparadas con las de aquellos a quienes únicamente se administró únicamente radioterapia.
“La importancia de este hallazgo en la práctica clínica es que la presencia de comorbilidades puede aumentar los efectos negativos de tratamientos específicos del cáncer, como la AST”, escriben los autores.
En conclusión, “añadir seis meses de AST a la RT tuvo como resultado una mayor tasa de supervivencia para los varones con cáncer de próstata localizado de mal pronóstico, y habrá que estudiar más a fondo las consecuencias en personas con otras enfermedades además del cáncer”, indican.
0