Música, artesanía y madera: abre en Logroño un taller de lutheria
Hace pocos días que en Logroño ha abierto sus puertas un establecimiento especial, en el que huele a madera y suena a violín. Un taller de lutheria, en el que construyen, restauran y ajustan violines, violas y violenchelos de manera totalmente artesanal.
Abel Osuna es músico desde muy pequeño y desde 2012 también luthier después de formarse en la ciudad italiana de Cremona, la cuna de los violines Stradivarius. Hace unos cinco años abrió su primer taller en Bilbao y ahora ha decidido mudarlo a Logroño: “llevo tiempo viviendo entre las dos ciudades y la pandemia ha acelerado la decisión de instalarme aquí de forma más estable, evitando tanta movilidad”.
La puesta en marcha de la idea ha sido fácil porque “yo venía con un taller previo y he mantenido esa esencia”. La de un taller muy artesanal con un gran escaparate que llama mucho la atención y que atrae, especialmente a los niños, que miran los instrumentos de cuerda que nacen en este local de la calle Caballero de la Rosa.
Este luthier confía en que su taller sirva para dar soporte a los músicos y las músicas de Logroño pero también de muchas ciudades cercanas y es que son pocos los que quedan en España en el oficio. “He visto que en La Rioja hay mucha vida de escuelas de música, conservatorios, academias...”, cuenta Abel Osuna.
Algunos violinistas ya se han acercado al taller y el resto lo hacen las redes sociales, donde muchas personas también contactan con Osuna Luthier para poner a punto su instrumento. Al otro lado de la puerta, pocas tecnologías más que esa, porque Abel Osuna apuesta por el minucioso trabajo de la artesanía para dar las mejores notas.
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