UGT advierte a New Plack sobre un embargo de 767.000 euros para indemnizar a obreros

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La empresa dice que quiere seguir fabricando a pesar de no tener ese dinero

CALAHORRA (LA RIOJA), 28 Abr. (EUROPA PRESS) -

El representante de la sección Metal, Construcción y Afines de la Unión General de Trabajadores, Ángel Fernández Íñiguez, ha informado que próximamente pedirán ejecución de sentencias para que el propietario de Prefabricados New Plack abone los 767.000 euros que según dice adeuda a los 11 trabajadores despedidos el año pasado; también ha deslizado una seria advertencia por lo que considera “amenazas contra la UGT” diciendo que este empresario “debería mirar a su espalda cuando sale a la calle”. Por su parte el empresario dice que tiene intención de salir adelante y niega presiones contra los sindicatos.

Las afirmaciones de UGT fueron hechas en la tarde de ayer, en el transcurso de una rueda de prensa desarrollada en su sede de Calahorra donde se dio a conocer la situación actual de los despedidos y de los trabajadores que continúan en activo en la planta de prefabricados de escayola.

En la convocatoria comparecieron también el representante de UGT en Calahorra, Carlos Antoñanzas, y el que fuera delegado del mismo sindicato en Prefabricados New Plack, José Luis Pascual, quienes mostraron su enojo porque “Pedro Moreno -gerente de la empresa- mintió el año pasado cuando afirmó que los retrasos en el abono de las nóminas a sus trabajadores eran un problema puntual”.

Al respecto cabe recordar que el empresario se defendió en su día explicando que la carga de trabajo había caído por la crisis del sector de la construcción y que los ingresos se habían visto afectados por multitud de impagos. Esto llevó a sus operarios a una huelga con manifestaciones en noviembre de 2009.

Ángel Fernández dice que el resultado es que “la empresa despidió a 11 trabajadores (...) eso fue en torno, me parece, que al tres de diciembre y a los 15 días se producen cinco contrataciones por tres meses”.

En cualquier caso, según este portavoz, se debe a los despedidos unos 767.000 euros en indemnizaciones, lo que motivaría que “en cuanto salgan las últimas sentencias pendientes que hay en tres magistraturas, haremos ejecución de sentencia”, lo que acarrearía un “embargo preventivo”.

Carlos Antoñanzas recordó que la empresa presentó un ERE que no fue aprobado por la Dirección General de Trabajo. Existe también “una sentencia del juzgado que no admite la readmisión de los trabajadores y condena a la empresa a pagar la indemnización y los salarios de tramitación desde la fecha de despido hasta la sentencia firme”.

Antoñanzas dijo que “desde la UGT hubo un intento de acuerdo para que los trabajadores desaparecieran de la empresa en unas condiciones decentes y rebajamos los más de 600.000 euros, correspondientes a los 45 días por año trabajado, a unos 230.000 euros, pero la empresa no accedió”.

También recuerda que “había en Inspección de Trabajo un acuerdo según el cual los trabajadores aguantaban sin cobrar dos mensualidades; pero también la empresa lo incumplió incrementándose la deuda, lo que llevó a los trabajadores a pedir la extinción del contrato”.

SITUACIÓN DE LA PLANTILLA

Por otra parte está la problemática de los trabajadores que siguen en activo y a los que, según UGT, también se les debe dinero. A este respecto, uno de los despedidos presentes en la rueda de prensa dijo saber que “se está pagando en fechas fijas pero con dos meses de retraso”.

Ángel Fernández cree que el empresario no tiene voluntad de solucionar el conflicto, “porque sigue fabricando lo que ha fabricado siempre y aquí no está pagando. Que pague, porque si no, igual terminamos yendo a la empresa a verlo... para que pague. Está jugando con el dinero de las familias y es el modelo de empresario que no debe haber en este país”, dijo.

El representante de Metal, Construcción y Afines sospecha además que se están desviando fondos: “Si está fabricando, no paga las indemnizaciones y debe salarios a sus trabajadores ¿A dónde van los beneficios de esta empresa?”, se preguntó.

“AMENAZAS A UGT”

En cualquier caso, los representantes del sindicato, refiriéndose de nuevo al gerente, aseguran que “esta persona está amenazando a este sindicato para que en esa empresa no haya elecciones sindicales (...) está amenazando con que no va a permitir que haya más delegados de UGT y lo que nos confirman es que parece que está interesado en que haya delegados de Comisiones [Obreras] (...) Uno de los candidatos que tenemos -siguió diciendo- no se quiere presentar porque ha habido amenazas de que si alguien se presenta por UGT, lo despide.

Refiriéndose otra vez al empresario dijo: “Este hombre, yo creo que cuando salga de su casa por las mañanas debería mirar a sus espaldas... Bromas, ninguna”.

Con respecto a esta última frase, el empresario Pedro Moreno, en declaraciones realizadas esta mañana a Europa Press, se ha referido a una posible denuncia recordando que no sería la primera que interpone contra personas vinculadas al sindicato: “La otra vez ya retiré las denuncias porque había un plan de acuerdo; pero si esa frase se publica así, esta vez haremos lo que tengamos que hacer”.

Por otra parte, el gerente de New Plack ha reconocido que debe el dinero de las indemnizaciones diciendo que le parece normal y que entiende “que cuando salgan las sentencias intenten cobrarlo, como debe ser (...) Creo que les prometieron unas indemnizaciones millonarias y si tengo que pagar eso, pues no puedo (...) ¿Qué va a pasar? ¿que me van a embargar? Que hagan lo que tengan que hacer, pero la gente que tengo, mientras tenga trabajo y pueda seguir trabajando, habrá que hacerlo (...) Los trabajadores que tengo ahora son dignos de partirse la cabeza por ellos”, añadió.

Con respecto a la situación de estos operarios en activo, Moreno ha dicho que “es mentira que se les deba dos meses”. Ha explicado que en total cuenta con una plantilla de siete personas “que tienen sus salarios al día, salvo tres de ellos -antiguos trabajadores que se quedaron en la empresa- a los que se les debe los dos meses del año pasado y que esperan a que la empresa resurja”.

Ha negado también que se desvíen fondos de la empresa argumentando que “desgraciadamente tenemos que estar peleándonos con precios muy ajustados de la competencia. Los márgenes de beneficio son muy escasos y con ellos se están pagando otras cosas que la empresa tiene atrasadas”.

En cuanto a la representación sindical en el seno de la empresa, ha negado que haya amenazas contra nadie y ha comentado que “ayer estuvo el CSIF, el otro día estuvo Comisiones Obreras, UGT se va a presentar y van a subir esta tarde con su candidato pues tiene aquí dos afiliados”.

Desmiente también que no quiera elecciones: “Fíjate, si tengo cinco trabajadores no habría elecciones; pero quiero seguir teniendo los siete y eso que hay dos con contrato recién renovado. Si no quisiera elecciones sindicales podría haber dicho: no los renuevo y así no tengo enlace [sindical]”.

También ha dicho que va a mantener los siete puestos de trabajo “con posibilidad de ampliar dos más durante el verano”

porque “no se trata de ir contra sindicatos ni contra nadie; de lo que se trata es de que aquí hay una crisis bárbara y parece que la he creado yo cuando la realidad es que la empresa es incapaz de recuperar los impagados que tiene”.