Arreglar Conde Duque, peatonalizaciones y otros proyectos de Malasaña para los Presupuestos Participativos
El camino de los Presupuestos Participativos 2018 acaba de echar a andar. La fase de recogida de proyectos de gasto finalizó este domingo y los vecinos de Malasaña han presentado decenas de ideas que a partir del 5 de marzo recogerán apoyos entre todos los ciudadanos inscritos en Decide Madrid.
El proyecto estrella este año son las peatonalizaciones. Se ha pedido hacerlo en Hortaleza y en el tramo de Fuencarral por el que circulan los coches (por partida doble), además de en el entorno del Mercado de los Mostenses y también cerrar al tráfico una parte de Espíritu Santo. Estos proyectos, que a veces generan muchos apoyos en una primera fase por su espectacularidad, suelen ser descartados cuando llega la votación final debido a su elevado coste económico.
En cuanto a grandes obras, los malasañeros también reclaman este año implantar la plataforma única en el tramo de Palma que va de San Bernardo a Amaniel y eliminar sus coches aparcados, así como arreglar las aceras de la zona de Conde Duque, rebajando también las aceras. En esta zona se ha presentado un proyecto para construir un aparcamiento para residentes bajo el parque de Conde Duque y también convocar un concurso de ideas para cambiar la cara del parque de Conde Duque, donde también se pide la instalación de canastas de baloncesto.
La movilidad no ha recibido este año demasiadas propuestas: uno de los proyectos de gasto solicita crear un carril bici segregado en la calle San Bernardo en lugar de los actuales ciclocarriles. Y otro pide instalar un semáforo que mejore la conexión de Malasaña con Chamberí (se pide dos veces), a mitad de Carranza.
Caminos escolares y una antena de radio
Entre el resto de las ideas de gasto presentadas en esta edición de presupuestos ciudadanos, se pide remodelar el final de la calle Maestro Guerrero, donde se instalaba una gasolinera y ahora queda un espacio sin uso. Convertir en juegos las salidas de aire del párking de Barceló o quitar las vallas del Museo de Historia de Madrid son otras de las opciones.
Además, se ha pedido un plan de limpieza especial para la calle Monteleón, un aula verde en el recién estrenado huerto urbano de Barceló y un vecino reclama eliminar zonas verdes de la plaza del Dos de Mayo “y ganar espacio para terrazas y otras actividades como mercadillos”.
De entre el resto de proyectos de gasto que afectan a Malasaña, este periódico apoya la creación de una red de caminos escolares seguros a varios colegios del barrio. Además, el colectivo Onda Maravillas lleva a votación poner una antena FM de radio para la creación de una emisora comunitaria.
Como nota curiosa entre las más de 150 ideas de gasto enviadas por el distrito de Centro a esta edición de los Presupuestos Participativos se ha pedido crear una valla homenaje a los Jevis de Gran Vía en la futura remodelación de esta calle. “Desde hace más de 15 años el límite para caminar por la Gran Vía siempre lo marcaron dos personajes que ya se han convertido en un punto de referencia de todos los madrileños. Y que ahora están completamente desubicados”, explican los impulsores de este proyecto.
El camino de los Presupuestos Participativos
El camino de los Presupuestos Participativos
Todos estos proyectos han de pasar ahora por diferentes fases, en un largo proceso participativo antes de ser aprobado que incluye dos fechas de votación y varias revisiones de técnicos del Ayuntamiento.
- Del 26 de febrero al 4 de marzo – Los técnicos municipales revisarán los proyectos y retirarán de la lista los inviables o aquellos que no se ajusten a las bases de la convocatoria. También pueden proponer que dos o más propuestas similares se unan.
- Del 5 al 19 de marzo – En el caso de que superen el primer trámite, cada idea buscará durante dos semanas apoyos del resto del vecindario y solo las más votadas en esta fase pasarán a la siguiente. No hay un número mínimo ni máximo fijado para hacer el corte.
- Del 20 de marzo al 7 de mayo – Los técnicos municipales evaluarán de nuevo los proyectos en profundidad, desde las áreas, y decidirán definitivamente si pasan a la votación final. Esta fase incluye la posibilidad de alegaciones en el caso de que una propuesta sea rechazada.
- Del 8 al 14 de mayo – El Ayuntamiento cifra el coste de cada partida, un aspecto clave ya que si un coste es mayor o menor disminuyen o aumentan las posibilidades de que el proyecto sea ejecutado.
- Del 15 de mayo al 30 de junio – Votación final de los proyectos presentados que han pasado todos los filtros previos. Cada ciudadano puede asignar los 2,4 millones de euros previstos para Chamberí y repartirlos como considere oportuno. Los más votados serán ejecutados a lo largo del año 2018.
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