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Botellón en San Mateo

Antonio Pérez

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La del botellón es una queja recurrente por parte de los vecinos del barrio. Todo el mundo sabe que sucede y dónde sucede, pero el problema no se soluciona. Javier es un vecino que nos ha enviado el siguiente comentario:

“En las calles San Mateo, Travesía de San Mateo y San Lorenzo los botellones cada vez empiezan más tarde, se te plantan a las 3 en tu puerta con botellas, latas y a joderse, porque la policía pasa. Alguna vez que han venido después de 4 llamadas, los he visto desde el balcón pasar de largo sin bajarse del coche. La última fue devolverme la llamada dos horas después para preguntarme si había llamado yo protestando y para que les confirmara la protesta y les dijera el punto exacto de la calle. Increíble, esperpéntico. Otra moda en mi calle, aparcan el coche, abren puertas, ponen música a todo trapo y a beber y a gritar y a mear. Estamos indefensos, en manos de gente que viene de lejos a mearse en nuestro barrio”.

Ya nos hemos hecho eco en otras ocasiones de los problemas que para el descanso vecinal supone el botellón y lo seguiremos denunciando cuantas ocasiones sea necesario.

No basta con que la Policía lo evite los fines de semana en las principales plazas del barrio. Aunque no sea tan visible, existe. En su día, en la plaza virtual de Somos Malasaña se creó un Grupo Antibotellón. Alguno de sus miembros propuso crear un mapa para localizar los puntos exactos de botellón en el barrio. ¿Te animas a denunciar y a ayudar a montar ese mapa?

Angela

Es una pena ver que hay más gente sufriendo los mismos problemas que nostros. Soy una vecina de la calle Barco, aquí además del botellón tenemos el problema del tráfico de drogas. Yo he optado por no llamar más a la Policía, no cambia nada y si pasan no bajan del coche, y en el servicio telefónico del 092 han llegado a colgarme gritándome cuando les digo que no se bajan del coche.

También he bajado a la calle y he pedido a la gente del botellón que por favor entiendan que estamos durmiedo y solo he recibido insultos y hasta empujones.

Sin olvidar los olores y suciedad en la calle...Todos hemos sido jovenes y hemos hecho botellones pero creo que se está desmadrando la situación.

No me quedará más remedio que dejar mi querida casa y cambiar de barrio a otro donde se pueda vivir.

Si alguien propone otra opción puede contar conmigo :)



Un saludo

Jose

Buenas a todos!.

Propongo algo que, quizás, resulte efectivo. Pronto serán las elecciones municipales, y por ello, es el momento de publicitar al máximo nuestras protestas para que el Ayuntamiento espabile de una vez. Utilizar las redes sociales, y si es posible, los medios de comunicación como radio y televisión para la retratar la situación que vivimos, para que todo el mundo vea lo que hay, puede escocer al Ayuntamiento. No es cuestión de politizar el asunto, tan sólo es cuestión de hacernos lo más visibles que podamos, y con ello, consigamos un barrio más limpio,cívico, y sobretodo, más habitable.

pepe

José,



Es smuy sencillo:



Graba videos de lo que vivís como vecinos.



Rasteriza un poco la imagen o dale un efecto que impida identificar la cara de los sinvergüenzas que no te dejan vivir.



Súbelos a You-Tube con textos sobreimpresionados que describan lo que se ve.



Escribe a todos los periódicos locales y nacionales dándoles el link de los videos o la url de tu canal de you tube.



Es muy probable que en unos días te escriban o llamen de algún medio para pedirte incluso si pueden grabar desde tu casa.



En unos días si sale la protesta en la radio o tv aparecerán sorprendentemente patrullas de policía para echar a la gente. Así no tendrás que gastarte tantos euros ni tiempod e stress para hablar con la policía local y/o nacional que pasará de ti por mucho que llames.

Ernesto

Buenas, yo soy un vecino de la Calle Pozas y estoy viviendo una pesadilla, todos los días sin excepción, absolutamente todos los días de la semana, se ponen a hacer botellón, delante de mi casa justo al lado de la cruz roja, un grupo de diez a quince niñatos que no paran de gritar, romper botellas, volcar y arrastrar contenedores, poner música, tirar basura, jugar al fútbol a las tres de la mañana a lo largo de la calle dando pelotazos en las ventanas, etc, y llevo dos meses llamando casi a diario a los municipales y no ha servido absolutamente de nada, ni siquiera se bajan del coche, cuando es patente que están bebiendo, consumiendo drogas y destrozando mobiliario urbano, con el ruido que ello conlleva.



Mi novia y yo nos tenemos que levantar a currar a las 7 de la mañana y es rara la noche que conseguimos dormir antes de las 4 de la madrugada. Todo eso que dicen de que el ayuntamiento ha endurecido la ley antibotellón para garantizar el descanso de los vecinos, es una pura falacia, en dos meses llamando casi todos los días no han puesto una sola multa, y que conste que yo no deseo que multen a nadie, simplemente que les den un escarmiento y se la marchen de ahí porque tenemos derecho al menos a descansar por las noches, que luego hay que currar con tres horas de sueño en el cuerpo y te pasas el día de mala hostia, y no quieres ni volver a casa porque ya desde las nueve o diez de la noches están montándola y no puedes ni ponerte a leer un libro en la cama o ver una película porque no se oye dentro de tu propia habitación.



Alguna vez les he dicho educadamente y con mucha calma que por favor bajen un poco la voz y no he recibido más que mofas y amenazas de que me esté callado que pueden joderme más si quieren, y que si no me gusta que me largue o le eche huevos y salga al portal a ver si me atrevo, etc. Los municipales que me atienden al teléfono ya hasta me dicen, una me lo dijo con muy malos modos, que deje de llamar porque no sirve de nada, y que esto es lo que hay, y cuando una de cada cinco veces que llamo se pasa una patrulla no les multan, charlan cordialmente con ellos y cuando se van, los niñatos se ponen a gritar el doble y a tirar latas contra la pared. Al final no te dejan vivir, te tienes que largar a pesar de ser un vecino respetuoso y currante que lo único que quiere es descansar en paz. Una pena, porque me encanta el barrio y finalmente voy a tener que irme de aquí por la falta de civismo de algunos y la falta de eficacia y profesionalidad de otros. Un saludo a todos los afectados por el problema del ruido, un problema bastante más grave de lo que parece, porque te puede joder la vida.
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