Una cooperativa de 25 años llama a los vecinos de Tetuán a acudir al juicio con el fondo que ha comprado su edificio

Mañana, 17 de julio, la Cooperativa ecológica de consumo Ecosol se verá las caras en el juzgado con el fondo Elix, que adquirió el inmueble donde se enuentra su sede y se ha negado a renovar el contrato. Ecosol lleva un cuarto de siglo en un pequeño local comercial del edificio del número 1 en la calle Salvia. Los últimos cinco años han sido los más ajetreados para ellos por los vaivenes del mercado inmobiliario. Después del fallecimiento de la casera del edificio en 2020, Salvia 1 empezó a pasar de mano en mano. En primer lugar, lo recibió en herencia la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios, que lo vendió a Apolo Real State S.L. Luego pasó a formar parte del catálogo de activos de Intedisa y finalmente recayó en Elix, que comenzó la etapa habitual en estos casos de rescinsión y no renovación de contratos.

Los inquilinos del edificio, muchos de los cuales llevaban décadas residiendo en él, comenzaron una estrategia de resistencia de la mano del Sindicato de Inquilinas e Inquilinos de Madrid pero, en este caso, la lucha no salió adelante. Aunque los carteles manufacturados por las vecinas en lucha permanecieron en el edificio mucho tiempo, todos fueron aceptando las indemnizaciones ofrecidas por Elix, con cantidades muy bajas según ha podido saber este medio que se explican por la situación de precariedad de algunos de los habitantes del inmueble. Actualmente, las obras del edificio avanzan a buen ritmo.

Pero el caso de la cooperativa Ecosol, que ha seguido la lucha de la mano del Sindicato de Inquilinas, ha sido distinto. Decidieron seguir pagando su alquiler en el juzgado aunque la sociedad no quisiera aceptar los pagos. Hasta la fecha, se han reunido con ellos en tres ocasiones –la última la semana pasada– para ofrecerles una cantidad de dinero para que se vayan. “Cantidades que son insuficientes para seguir con la actividad, siempre dicen que puede servir para retomar el negocio en otro sitio pero no entienden que nosotros no somos una negocio sino un proyecto sin ánimo de lucro que no puede existir sin un local” , explican desde Ecosol, quienes llegaron a pedir al fondo sin éxito que les facilitara otro alquiler asumible en Tetuán.

La comunidad de Ecosol se aferra al espacio porque saben que los precios de mercado, tanto de alquiler como de compra, están fuera de sus posibilidades, lo que los aboca a la desaparición fuera de Salvia. Por eso irán hasta el final. De momento, al juicio por incumplimiento de contrato (ya espirado) que tendrá lugar mañana en los juzgados de la calle de Rosario Pino, en el mismo distrito de Tetuán. El juicio es a las 11 de la mañana y están pidiendo que la gente vaya a dar apoyo a partir de las 10.15 . “Queremos que se visibilice que esto es algo que afecta a muchas personas”, explican.

La sociedad Elix Rental Housing Socimi II opera junto a la empresa AltamarCAM Partners, una entidad presidida por Claudio Aguirre, primo segundo de la expresidenta de la Comunidad de Madrid Esperanza Aguirre. Ha salido en los últimos años en los papeles por la compra y vaciado de diferentes inmuebles en diferentes distritos de Madrid. Esta es la primera ocasión en la que llegan a juicio con los inquilnos, pues hasta la fecha su estrategia ha sido el ofrecimiento de cantidades de dinero para que estos se marcharan. Sin embargo, es posible que no sea el último. El pasado 30 de junio se supo que los vecinos y vecinas del número 7 de la calle Tribulete, en Lavapiés, han decidido presentar una querella por acoso inmobiliario contra e fondo por presuntas coacciones y amenazas.