De imputado a ensalzado. O de posible realizador de un delito a premiado. Ese podría ser el resumen de un ascenso profesional que ha tenido el que fuera responsable de la oficina de Correos en el municipio de Pradoluengo, al este de la provincia burgalesa, que está siendo investigado, judicialmente, por una supuesta recogida ilegal de votos en un asilo. Y, según el PSOE, ahora es el director de una sucursal de Correos en Burgos.
En junio de 2012 se conoció el auto de imputación del Juzgado de Briviesca, por el que se apuntaba a 4 personas por su presunta implicación en la recogida de votos ilegal en la residencia San Dionisio, de Pradoluengo, días antes de las elecciones municipales y autonómicas del 22 de mayo de 2011.
Los imputados fueron: el director de la oficina de Correos de Pradoluengo, A.P.O; el secretario del patronato del asilo, A.B.R.; el director de este centro, R.M.A., y una auxiliar administrativo, M.A.M.B.
La investigación judicial se inicio tras la denuncia de la hija de uno de los internos de la residencia, quien según el censo electoral había votado por correo, cuando estaba en un estado de dependencia total, con una demencia senil. El Juzgado de Briviesca, tras la notificación por parte de la Fiscalía, llamó a declarar a los implicados y recibió un informe de la Dirección de Auditoría e Inspección de Correos, en la que analizaba la actuación del director de la oficina de Pradoluengo. En el se revelaba que había incumplido lo establecido al acudir en horario de atención al cliente a la residencia San Dionisio para recoger solicitudes de inscripción del censo, dejando la sucursal cerrada. También se apuntaba a que no siguió el procedimiento para solicitar el certificado de inscripción en el censo para casos de enfermedad e incapacidad, que impide la formulación personal de la solicitud.
El auto judicial señaló que el director de la oficina de Correos alegó que fue a la residencia por petición de su director, y que él mismo ayudaba a los solicitantes a rellenar el impreso cuando éstos bajaban a la salita donde se encontraba, y en caso de no poder firmar solicitaba huella dactilar.
Ahora, un año después de conocerse aquel auto de imputación, el diputado del PSOE por Burgos y secretario provincial de los socialistas, Luis Tudanca, ha denunciado un paso más en ese truculento asunto: el director de la oficina de Correos ya no está en Pradoluengo, sino que ha sido ascendido a la capital burgalesa, como director de otra sucursal.
Eso sí, según Tudanca, se “han saltado el procedimiento y la antigüedad de otros empleados de Correos que querían optar a este puesto”. Por ello, ha registrado una queja oficial ante la Mesa del Congreso de los Diputados, que no le contestó a sus dos preguntas parlamentarias sobre el destino de este empleado de Correos.
Por ello, el secretario del PSOE en Burgos ha pedido “públicamente responsabilidades al Partido Popular y al Gobierno por ocultar esta información, por actuar de forma absolutamente cínica con este asunto, por incumplir la obligación que tiene de facilitar información a los diputados del Congreso, que estamos representando a todos los ciudadanos de la provincia y, desde luego, les pido que de forma automática mañana mismo cesen al director imputado en un caso de delito electoral”.
