`All you need is love´: 100% warmers

Algunos `warmers´ seguían pululando el domingo Día de la Madre por Murcia con sus vasos de cerveza en la mano y sus pintas de modernos. Muchos de ellos no habían parado desde que el viernes 3 de mayo empezaran el botelleo a las cuatro de la tarde en el aparcamiento del Eroski hasta acabar bailando en los conciertos gratuitos de Plata o Alexanderplatz que se celebraron durante el mediodía del domingo.

La noche del sábado, la segunda jornada del Warm Up, fue el culmen de público: el exOasis Noel Gallagher acompañado de High Flying Birds y la banda de indie español Vetusta Morla congregaron a las masas en nombre del pop hasta el punto de que ambas jornadas reunieron a 56.000 personas en La Fica. Gallagher acabó el show entonando `All you need is love´ de los Beatles, el himno que resumió la noche.

“Ya se acabó lo de hacer quinielas de bandas para toda la noche. Como somos un grupo de seis amigas, cada día elijo un concierto que me gusta y el resto del tiempo fluyo. Ayer fue Javiera Mena a las 16.30 de la tarde y hoy ha sido el grupo Cariño. Yo tiro para lo mío: mujeres y lesbianas”, decía Silvia algo cansada ya a las dos de la mañana mientras esperaba en la fila para entrar a uno de los aseos portátiles.

Porque lo que diferencia al Warm Up del previo WAM y SOS es que aunque ha continuado la estela del pop más indie, también ha abierto el festival a intérpretes más mainstream y grupos que hacen de reclamo para distintas generaciones. Lo que ha perdido en especialización, lo ha ganado en diversidad. En La Fica convivían cuarentones, algunos de ellos paseando carritos de bebés, con jovencísimos con el rostro cubierto de purpurina.

“Es la primera vez que vengo a un festival de música y estoy encantadísimo con tanta diversidad de gente y música”, dijo Dani, un malagueño de 39 años. “Me agobian las aglomeraciones, pero aquí hay mucho espacio y puedes ir tranquilamente de un sitio para otro”, señaló. La entrada y la salida del festival e incluso las colas para ir al baño o el servicio de las barras fluían con rapidez. “Lo único que no entiendo es por qué un lugar tan diverso tiene un espacio reservado para unas pocas personas”, añadió Dani señalando a la zona VIP del festival.

Acompañado de su novio Raúl, el malagueño abandonó el directo de Noel Gallaguer´s High Flying Birds porque le parecía “un coñazo” para bailar al son de Cariño. “Me gustan las chicas / cómo pudo pasar” cantaba Alicia Ros junto con sus compañeras Paola Rivera y María Talaverano. Cariño sonó en el escenario tal y como se describen con su lema “pop de barrio para la bajona” desde su insultante juventud en el escenario Up, el más pequeño y alternativo y por donde también pasaron, entre otros, los murcianos Crudo Pimento, Axolotes Mexicanos para cerrar con el tecnopop de Putochinomaricón.

Mientras que en el escenario principal Vetusta Morla se coronaba como los reyes del pop en castellano tocando desde la inicial ‘Deséame suerte’ hasta la final ‘Los días raros’ tras la interpretación del exOasis, el público más vanguardista bailaba con los ritmos de la DJ murciana Carrie Palmer en el escenario Dancefloor, donde también se había escuchado el electrofolk de Baiuca o el trap de Catnapp.

“Los murcianos están ahí escuchando a Vetusta Morla cuando tienen aquí a Carrie que es una chamana. Muchos payos aquí en Murcia no la entienden”, apuntó Estela, una “trapera”, como se describió a sí misma esta murciana de 33 años. Pablo, su novio, se quejaba de que cada año era más difícil meter al festival botellas de alcohol escondidas en la ropa porque había “más control”.

“Ahora estoy cansada porque llevo desde las nueve de la mañana trabajando, dentro de un rato estaré mejor”, dijo Estela mientras su novio le pasaba un cuarto de “cristal del bueno” que les había regalado una amiga nada más llegar a La Fica. La pareja siguió bailando mientras mucha gente, entre quienes se encontraba el presidente de la Región, Fernando López Miras, que iba vestido con un look juvenil sin el traje y corbata que acostumbra en sus apariciones públicas, abandonaba el recinto tras acabar el concierto de Vetusta Morla.