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“El swing es adictivo, divertido y muy alegre, da envidia ver a otros bailarlo”

En la imagen, Gloria baila en un encuentro en Vitoria. Foto: DenaFlows

Celia Bustamante

Unas 60 personas bailan swing en Pamplona. Un baile desconocido, con su origen en los años 20 en Estados Unidos, que está siendo recuperado en la Comunidad Foral por Pamplona Swing. Una asociación que difunde el ‘Lindy Hop’, el tipo de baile más común de la música swing, que organiza cursos y queda semanalmente para bailar. Más de un pamplonés se habrá encontrado con ellos bailando en verano en la calle, en sus encuentros ‘Clandestinos’, o le hayan sorprendido en algún bar del centro en alguna de sus quedadas. Gloria Robles es una de las participantes de la asociación. Baila swing y con mucho entusiasmo anima a todo el que quiera a que comience a bailar ‘Lindy Hop’, un baile enérgico, divertido, y adictivo.

¿Cómo empezó Pamplona Swing?

Todo empezó porque una profesora llegó a pamplona desde Barcelona, donde se baila mucho swing, y al llegar aquí quería bailar pero no había nadie que bailara. Entonces empezó a dar clases y creó la asociación. Al principio éramos muy pocos y solo se daban clases, y quedábamos para bailar algunos días, y ahora cada día hay más gente bailando, intentamos promocionarlo como podemos, hemos abierto una página de Facebook…

¿Qué tiene el Swing que no tienen otros bailes?

El swing es un baile muy social, la gente no se queda con ir a clase y ya está. La motivación de aprenderlo es para ir a bailarlo. Si te quedas con lo que aprendes en clase y no lo bailas no te quedas contento, lo suyo es ir a bailarlo.

Pero, ¿adónde vas a bailarlo aquí en Pamplona?

Tenemos quedadas semanales los jueves de 10 a 12 de la noche en el Liverpool y cada dos sábados en el Civivox de la Milagrosa también hacemos quedadas para bailar. Lo de los sábados es como un paso intermedio entre clases y baile; una especie de prácticas gratuitas. Es como si fueran unas clases multinivel, practicas, preguntas a los compañeros o a la profesora…

Para empezar habrá que asistir a clases, ¿organizáis cursos de iniciación?

Se hacen bloques de ocho sesiones de una hora. Cada bloque es un nivel, es continuo. No solo es un curso de iniciación, sino que si sigues, vas subiendo de nivel. Además, siempre quedan cosas por aprender. Son 8 bloques de cada nivel, es el estándar que se suele utilizar en otros sitios. Recibiendo clases puedes estar toda la vida. Se empieza y el que quiere, sigue.

¿Cada cuánto organizáis este tipo de cursos?

Los organizamos cuando surgen varias demandas o, aproximadamente cada dos meses. Por ejemplo ahora, a comienzo de curso hemos sacado en dos meses tres cursos porque es cuando la gente más se anima.

¿Es necesario empezar con un curso, o se puede empezar aprendiendo de otros en las quedadas?

Si primero no aprendes, por lo menos lo básico, no puedes bailar.

¿Y es necesario tener una pareja de baila para aventurarse en el swing?

A la gente le pedimos que se apunte en pareja, porque se baila en pareja. Si no hay un número mínimo de parejas en una clase no se puede bailar porque la mitad de la clase estaría la gente parada. Demandamos que la gente vaya en parejas, como mucho permitimos a una o dos chicas en cada clase sin pareja. Si estás muy interesado y no tienes pareja te apuntas y entras en una lista de espera y cuando se apuntan chicos sueltos, se empieza.

Bailar con un desconocido…

No es una pareja para toda la vida porque es un baile en el que se rota muchísimo, luego bailas poco con esa pareja, bailas con el primero que pasa por allí, es lo que tiene de divertido.

¿Por qué se anima la gente con un baile de los años 20?

Es un baile que la gente cuando lo ve dice que transmite mucha alegría, es muy divertido porque es muy de improvisar, tiene muchas figuras que requieren cierto nivel, pero son muy llamativas. De buenas a primeras es muy adictivo y divertido, muy alegre. Estamos todos sonriendo y se transmite mucha energía, da envidia ver a otros bailarlo.

¿Qué tipo de personas se animan con el swing en Pamplona?

Baila gente de todas las edades y todos los sitios. La única limitación es que tu cuerpo te permita bailar. Hay gente muy mayor bailando, aquí en pamplona menos porque llevamos poco tiempo, pero sí, nos juntamos gente de todas las edades.

¿Hay algún requisito físico para poder bailar o es apto para todos los públicos?

Hay que tener una cierta forma física, pero como se empieza poco a poco se va cogiendo y además, cada uno baila a su ritmo. Hay gente que tiene mucha energía y baila muy rápido, hay canciones más rápidas y más lentas, y cada uno baila en la medida de sus posibilidades.

¿Qué acogida tiene el swing en Pamplona? ¿La gente lo conoce?

Es difícil encontrar un sitio en el que nos dejen bailar porque es un baile desconocido y los bares quieren tener su público asegurado. Nos está costando que la gente nos deje espacio para bailar, pero por lo menos tenemos algún sitio en el que sí que nos dejan.

Y hacéis quedadas ‘Clandestinas’…

De vez en cuando, más en verano. El nombre viene de los años 30 y 40 una época en la que no estaba permitido bailar en muchos lugares de Europa y la gente quedaba clandestinamente. Y hemos recogido ese nombre. Quedamos con un aparato de música en la calle para bailar. En Barcelona quedan todos los domingos, nosotros hacemos de vez en cuando, no lo tenemos programado, pero de vez en cuando bailamos en lo viejo o en Yamaguchi, vamos cambiando de sitio. Es una forma de poder bailar al aire libre, que el final en un sitio cerrado hace mucho calor y es más agradable bailar en la calle y aprovechamos para que la gente nos vea y lo conozca pero el objetivo no es exhibirnos sino bailar.

Participáis además en encuentros en otras provincias.

Se hacen festivales de fin de semana por todo el mundo, todas las ciudades europeas tienen su festival, en Barcelona, Vitoria, Zaragoza… muchas ciudades tienen estos encuentros con profesores internacionales que dan clases durante el día y fiestas por la noche con música en directo para bailar y pasarlo bien.

¿Y para cuándo un festival en Pamplona?

En Pamplona lo estamos pensando, pero requiere una logística importante y queremos prepararlo bien porque el nivel es muy alto. De momento no tenemos fecha, pero sí lo tenemos en mente y además está demandado. Gente de otras provincias que vamos conociendo nos anima a que hagamos un encuentro en Pamplona pero todavía estamos en ello.

¿Y para cuándo un nuevo curso para el que quiera comenzar?

Va a empezar el 5 de noviembre un curso, los miércoles de 7.30 a 8.30. Estos cursos cuestan 64 euros el bloque de 8 sesiones y las clases son en el polideportivo de Cordovilla

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