Decenas de miles de húngaros protestan en Budapest reclamando democracia

Decenas de miles de húngaros se manifestaron hoy en Budapest en contra de su primer ministro, Viktor Orbán, para reclamar democracia y libertad de prensa.

“Somos la mayoría” fue el lema también de esta marcha, que se organizó justo una semana después de la primera de una serie prometida por los organizadores y que registró una participación masiva.

La marcha de hoy, también convocada a través de las redes sociales, partió desde la plaza Kossuth, donde se encuentra el Parlamento, y cruzó el centro de la ciudad para llegar a la calle Szabadsajtó ('Prensa libre'), a los pies del puente Erzsébet.

Orbán logró su tercera mandato consecutivo por mayoría absoluta el 8 de abril después de una campaña protagonizada por el supuesto peligro que la inmigración suponía para la identidad húngara y que le dio una mayoría de dos tercios en el Parlamento.

“Durante la transición logramos la libertad sin tener que luchar por ella. Esta generación necesitaba una bofetada. Espero que la mayoría de dos tercios que logró Orbán despertará a la sociedad y hará entender que hay que luchar por la libertad y la democracia, todos los días”, explicó al portal HVG uno de los organizadores de la marcha, Gergely Homonnay, dos días antes de la manifestación.

Por su parte, el alcalde independiente de la localidad de Hódmezövásárhely, Péter Márki-Zay dijo hoy ante los manifestantes que “este régimen no es una democracia. Por ello es importante la unión y cooperación de toda la oposición”.

La directora de la ONG pro derechos civiles Ökotárs, Veronika Móra, pidió el apoyo del pueblo a las organizaciones no gubernamentales y agregó que para el Gobierno “las personas que piensan son peligrosas”.

En la marcha participaron simpatizantes de todos los partidos de la oposición, desde la izquierda hasta la extrema derecha, con carteles que rezaban “Stop Orbán”, “Estamos hartos” o “Queremos democracia de nuevo”.

Las primeras declaraciones de los líderes del Fidesz, el partido gubernamental, advirtieron que el nuevo Gobierno de Orbán ahondará en sus políticas contra la inmigración y contra el magnate estadounidense de origen húngaro George Soros, enemigo político del primer ministro.

Soros ha financiado organizaciones y proyectos que fomentan los derechos humanos, la separación de poderes y la transparencia.

La nueva legislatura está prevista que empiece en los primeros días de mayo y, como primera medida, Orbán prometió la aprobación de nuevas restricciones al trabajo de las ONG en el país centroeuropeo.

Orbán y su Gobierno han sido criticados tanto en el país como en el extranjero desde 2010 por limitar las libertades civiles en el país centroeuropeo, y sus conflictos con la Unión Europea (UE) sobre los valores democráticos se han generalizado.