Entrevista Exdiputada del PSOE en la Asamblea de Madrid

Carla Antonelli: “No hubo problemas con la autodeterminación de género en el PSOE hasta que Podemos llevó Igualdad”

David Noriega

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Carla Antonelli (Güimar, 1959) sabe lo que es reivindicar los derechos de las personas trans ante su propio partido. Cuando en 2007 el PSOE sacó adelante la ley de Identidad de Género que permitía el cambio registral sin cirugías, ella había amenazado con una huelga de hambre ante los retrasos en la tramitación. 15 años después, la primera diputada trans de España, que se quedó fuera de la Asamblea de Madrid tras ser relegada en las listas en las últimas elecciones autonómicas, ha presentado este martes su baja de militancia del Partido Socialista, con una crisis interna a cuenta de la autodeterminación de género que recoge el propio anteproyecto de ley aprobado en Consejo de Ministros con Unidas Podemos, pero que ha causado tensiones dentro de la formación.

“No es de mis mejores días”, reconoce Antonelli en conversación con elDiario.es, mientras afirma sentirse decepcionada con el partido que ha sido su casa durante 25 años por “no estar a la altura de las circunstancias” y ceder “ante el chantaje” de quienes solo miran “por su intereses particulares”.

¿Cómo se encuentra?

Ha sido un día largo, duro, difícil. Por momentos con un inmenso vacío, como es lógico, pero es un paso obligado. Hay gotas que colman los vasos de agua y en este caso el vaso estaba absolutamente rebosado desde hace dos años y medio, desde aquella infame noche del 9 de junio, donde se envió a toda España un argumentario absolutamente vergonzoso. Aún así, aguanté por una cuestión de prioridades, por la defensa de la ley trans, pero las últimas noticias de los aplazamientos de las enmiendas han sido el culmen. Por eso digo que en mi nombre y en el de mi militancia, desde luego que no.

Había un compromiso de que la ley trans se aprobase en diciembre. ¿Cree que saldrá adelante esta legislatura?

Vamos a intentar por todos los medios que ese compromiso se cumpla, no de palabra, que se las lleva el viento. La ley ha sido aceptada por la vía de urgencia y ese es el trámite que tiene que llevar. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tiene que tomar cartas en el asunto, de la misma forma que las tomó hace dos años y medio y cuando se aprobó [el anteproyecto de la ley] en Consejo de Ministros. Tiene que volver a poner en orden esta situación. Llevar la ley trans a después de los Presupuestos es llegar a enero, que no es hábil, y después a pleno periodo electoral. Es otra excusa. Y luego ya está el final de la legislatura y eso no lo vamos a permitir de ninguna de las maneras.

¿Entiende que pueda haber discrepancias en el partido acerca de la autodeterminación de género?

No lo entiendo porque es mentira. Te lo explico: nunca ha habido problemas ni discrepancias en el Partido Socialista acerca de la autodeterminación. Antes de 2019, el PSOE votó la autodeterminación y la llevó al Congreso de los Diputados con la reforma de la ley 3/2007. La votamos en el año 2016 en la Asamblea de Madrid, en la comunidad de Andalucía, en la Comunitat Valenciana, Baleares, Canarias. Todas estas supuestas posturas en contra solamente se producen después del año 2019, cuando se entra a formar parte de una coalición de Gobierno y el Ministerio de Igualdad está en el otro partido. Por lo tanto, yo digo, afirmo y reto a cualquier persona de las que están diciendo que existe un problema a que saque una hemeroteca de hace cuatro años donde hubiera un problema. No existe, porque todo ha consistido en una gran mentira. Las mismas personas que hoy dicen que eso es un problema, en 2019 salieron a las puertas del Congreso a hacerse una foto después de haber votado la autodeterminación y la despatologización. No es posible que entonces no fuera un problema y lo sea ahora que el Ministerio de Igualdad lo lleva Podemos.

Algunas de las personas que estaban en esa foto dicen que desde entonces se han formado con experiencias de otros países

Les dices de mi parte que tengan un poquito de vergüenza y que no nos tomen por idiotas, que estamos un poquito mayorcitas para que nos digan tremenda sarta mentiras. Diles que solo es una guerra por cuotas de poder, que nunca fue ideológico, que mienten.

Usted se ha enfrentado públicamente con la exvicepresidenta Carmen Calvo, que fue cesada. Dentro del partido, ¿quién está peleando por esas cuotas de poder?

No hace falta estar en un cargo para seguir peleando por unas banderas que supuestamente se creen que son robadas. Se está peleando por lo que se creen que les pertenece. Aquí el problema no es ese, ese es el fondo. El problema es que por el medio se ha utilizado a miles de personas, de personas trans, a las que se ha vapuleado, se ha vilipendiado, se ha señalado. Ese es el verdadero problema. Lo otro solo son intereses espúreos y egos histriónicos.

¿Cómo está afectando este conflicto a la vida de las personas trans?

Este conflicto ha sido terrible. Las agresiones a menores trans se han multiplicado por cien, según trabajadores sociales. También el acoso y el derribo en redes. Nadie era nadie ni nada si no opinaba sobre la ley trans. Incluso se llevó el tema a Cuarto Milenio. Tomemos conciencia del disparate en el que nos hemos visto envueltas. Ha afectado a personas psicológicamente, nos han criminalizado sacando casos cogidos por los pelos de un señor en Canadá o en no sé dónde, pretendiendo exponer con un caso en singular que miles de personas éramos asesinas, violadoras, pederastas. Nos han llamado de todo.

¿Hay margen para encontrar una posición de consenso dentro del PSOE para que haya una ley trans que contente a todas las partes?

Siempre hay un margen y es cumplir el 40º congreso del Partido Socialista, si es que una persona se entiende como demócrata. Si no, se lo tiene que mirar. Y cumplir el compromiso del programa electoral.

En el programa electoral de 2019 no se mencionaba la autodeterminación de género.

Hablaba de la reforma de la ley 3/2007, que habíamos registrado nosotros en el año 2017, donde había un texto más avanzado y más progresista que el que tiene ahora la ley trans. El Ministerio de Igualdad cogió ese texto del PSOE, pero en esta refriega se han quedado cosas por el camino porque hemos renegado de lo que nosotras mismas hemos escrito. Es paradójico, pero eso demuestra la incoherencia y la inconsistencia de quien se muestra en contra de la autodeterminación. En 2019 nadie dijo nada y era bueno.

Algunas voces dentro del PSOE críticas con el texto aprobado en Consejo de Ministros proponen un acompañamiento psicológico o que haya testigos, como ocurre en otros actos que tienen que ver con el registro civil. ¿Ese podría ser un punto de encuentro?

No, por supuesto que no. ¿Qué les parecería si alguien pretendiera meter eso mismo en el derecho a la interrupción voluntaria del embarazo? Es una cuestión de libertad, de voluntad. En 2018, la Organización Mundial de la Salud dijo que la transexualidad no era ninguna psicopatología ni trastorno mental. ¿Por qué se nos va a tratar como si tuviéramos un trastorno mental, qué tipo de tutelaje es ese? La decisión sobre quien soy la tengo yo sola. ¿Cómo se atreven a pedir lo que no hemos pedido para tantas otras con otras leyes? La autodeterminación no es otra cosa que la libre emancipación y de eso el movimiento feminista y las mujeres de forma global sabemos mucho, que hemos pasado de las tutelas de padres a maridos y a otras tantas. Basta de tutelas y tutías. Nadie me tiene que decir qué es lo que tengo que hacer para conseguir un DNI.

No siento vergüenza del Partido Socialista, siento estupor y decepción por no haber estado a la altura en estas circunstancias

En el hilo de twitter en el que anuncia su baja del partido hay frases muy duras. Dice que prefiere poder mirar a la cara a las personas trans que sentir la vergüenza de haberlas traicionado...

[Interrumpe] Eso es liberador.

¿Siente vergüenza del Partido Socialista?

No, yo no siento vergüenza, lo que siento es estupor, es decepción por no haber estado a la altura en estas circunstancias. Después de tomar el cauce correcto, en los últimos 15 días se ha dejado amedrentar por 60 personas en fila india en el Congreso, en contra de millones de personas en este país, donde todas las encuestas dan que el 80% está a favor. Reflexionemos a quién se está haciendo caso en vez de la gran mayoría.

El PSOE de Zapatero, de Zerolo, de las leyes, de la Asamblea de Madrid con Ángel Gabilondo, de Ángel Víctor Torres, de Canarias, ese partido no me ha decepcionado nunca. Me ha defraudado la forma de comportarse desde hace dos años y medio, donde parecía que había un horizonte de luz y ahora de pronto han cedido al chantaje y a cantos de sirena de 60 en fila india con acceso a altavoces mediáticos heredados desde el poder, porque no son más que eso.

Altos cargos del partido y del Gobierno defienden que todos los avances sociales, también en materia LGTBI, llevan su sello. ¿Considera que ha perdido el PSOE esa bandera?

Se lo tiene que hacer mirar. Es una cosa empírica que el matrimonio igualitario, la ley de identidad de género, con lo que costó, y las leyes autonómicas salieron de la mano del PSOE. Ahora tiene un problema por haberse dejado arrastrar por un grupo de personas que miran por sus intereses particulares.

¿Compartió con alguien del partido su decisión de darse de baja?

Sí, se lo dije a personas muy allegadas, pero era una decisión ya tomada. Me intentaron hacer cambiar de opinión, pero el horizonte es el que es y no hay otro camino. Es el mismo que tomé hace 16 años. Ante los derechos fundamentales del colectivo no hay partido ni ideología política que valga. Eso que considerabas duro no es otra cosa que coherencia y principios inherentes. No los he perdido nunca ni los voy a perder. El día que pierda eso empezaré a navegar en la nada.

¿Se ha planteado colaborar con otro proyecto político? ¿Se lo han propuesto?

No, ahora mismo mi presente es el día de hoy y el horizonte siempre se dibuja y se colorea. Yo estaré allí donde se estén defendiendo los derechos fundamentales de las personas trans y estaré apoyando como activista y socialista que soy en cualquier sitio y en cualquier espacio, no en el sentido de una formación política que es lo que me estás queriendo decir. Seguiré siendo la misma persona que he sido toda la vida y seguiré defendiendo lo mismo que he defendido hasta el día de hoy, porque no he podido entregar más de lo que he entregado. Entregué hasta el escaño.

En las elecciones para la Comunidad en 2021 se quedó fuera de la Asamblea. ¿Lo vivió como un agravio?

Lo viví como una consecuencia que sabía que se podía producir cuando contesté el 10 de junio de 2020 a aquella ignominia y aquella blasfemia de aquel argumentario. Entraba dentro de las posibilidades. Soy consciente de todos mis actos, pero nunca con la cabeza más alta. Siempre de frente. Esto de agachar la mirada, finito. Eso se acabó, queda para tiempos pretéritos.