El fiscal jefe Anticorrupción, Alejandro Luzón, ha solicitado al juez del Tribunal Supremo Leopoldo Puente que ordene el ingreso en prisión del exministro de Transportes José Luis Ábalos y del que fuera su asesor Koldo García, ante el riesgo de fuga existente en ambos, informan fuentes jurídicas. Las acusaciones populares se han sumado a la petición de prisión para Koldo García, al igual que han hecho con Ábalos. Las defensas del ministro y el exasesor han solicitado que quedaran en libertad a la espera de juicio porque, han defendido, no hay riesgo de fuga.
Ahora, el juez Puente debe tomar una decisión sobre si envía a prisión a ambos investigados por corrupción o impone otras medidas cautelares. Hasta ahora, el magistrado ha seguido el criterio del fiscal jefe Anticorrupción, quien hoy dejó una frase para rebatir la tesis de la defensa de Ábalos, cuyo abogado esgrimió el derecho de su cliente a la representación política. “Ningún poder del estado puede esgrimirlo para eludir la responsabilidad penal y por eso la Justicia se representa con una venda en los ojos”, ha dicho Luzón, según fuentes presentes en la vistilla.
Ambos investigados han tomado la palabra brevemente para negar que tuviera intención de fugarse. Ábalos ha dicho que si no lo ha hecho en esta semana, desde que se convocó la vistilla para decidir sobre su prisión, tampoco lo iba a hacer ahora. Por su parte, Koldo García ha expresado: “Todos tenemos derecho de aprender poco a poco y yo no voy a ir a ningún sitio”. García ha esgrimido que tiene una hija pequeña y su madre, de avanzada edad, en Benidorm y que eso le produce un arraigo incompatible con la fuga.
La abogada de Koldo García ha utilizado su intervención para presentar un recurso cuestionando la competencia del Supremo a partir de las declaraciones de Víctor de Aldama esta mañana en la Audiencia Nacional. El empresario y comisionista, también investigado en el Supremo, ha declarado en el marco de la causa que se sigue en el Juzgado de Instrucción número 2, que dirige Ismael Moreno. Aldama comparecía por la trama de mascarillas en Canarias y la abogada de Koldo ha utilizado las supuestas novedades para solicitar en el Supremo que la causa regrese a la Audiencia Nacional. Todas las acusaciones se han opuesto.
Las citadas fuentes han apreciado a Ábalos visiblemente nervioso y más calmado a Koldo García, ante la petición de Anticorrupción al juez para que envíe a ambos a la cárcel. Se espera que en las próximas horas el juez Puente tenga listo sendos autos con sus decisiones.
El magistrado del Tribunal Supremo ha citado este jueves al ex ‘número tres’ del PSOE y quien fuera su asesor Koldo García a petición de la Fiscalía y las acusaciones populares para comparecer en una vista sobre las medidas cautelares que pesan sobre ambos. Hasta ahora, debían comparecer cada 15 días en el juzgado y también se les había retirado el pasaporte. La vista sobre las medidas de Koldo García se celebrará a partir de las 12.30 horas.
Durante la vista, el abogado de Ábalos, Carlos Bautista, ha alegado que encarcelarle antes del juicio supondría una vulneración de su derecho a la representación política y que tiene arraigo como diputado, de acuerdo a las fuentes consultadas. Ábalos ha tomado brevemente la palabra durante la vistilla y ha afirmado que no hay riesgo de que se marche de España.
Los tres supuestos que recoge la ley para que un juez dicte prisión provisional son: riesgo de destrucción de pruebas, de fuga o reiteración del delito. El primero y el último parecen superados, pero la petición de hasta treinta años de cárcel que pesa sobre el exdirigente socialista se ha interpretado por el fiscal jefe Alejandro Luzón como motivo suficiente para su posible huida.
El pasado octubre ya se celebró una vistilla sobre el posible ingreso en prisión de Ábalos y Koldo. Ocurrió después de que ambos se negaran a declarar ante el juez en la pieza de las adjudicaciones de obra pública, la misma que ha mantenido al exdirigente socialista Santos Cerdán en la cárcel cinco meses. Entonces, la Fiscalía no reclamó su entrada en la cárcel y el juez Puente no les envió a prisión aunque advirtió del “creciente riesgo de fuga” ante la cercanía del juicio.
El posible ingreso en prisión de Ábalos tiene unas consecuencias políticas directas, las que se desprenden de su condición de diputado del Grupo Mixto. Fuentes del Congreso de los Diputados aseguran que si el magistrado Puente acaba decretando su ingreso en prisión, la Cámara suspendería a Ábalos, que perdería su derecho a participar en las votaciones parlamentarias.
En el caso de que la Cámara llegase a disolverse, por la convocatoria de elecciones, y él siguiera en prisión, Ábalos no tendría derecho a percibir la indemnización que contempla el Congreso para los parlamentarios cuando dejan de serlo. Solo una decisión de Ábalos de renunciar a su acta de diputado antes de ser encarcelado le permitiría mantener esa indemnización, según fuentes parlamentarias.