El Gobierno rebaja las expectativas ante la reunión de Sánchez y Torra: “No esperamos resultados en el corto plazo”

El Gobierno rebaja las expectativas respecto a los frutos que pueda dar la reunión de Pedro Sánchez y Quim Torra del próximo jueves. La portavoz, María Jesús Montero, ha reconocido que no esperan “resultados en el corto plazo” respecto a la resolución del conflicto político en Catalunya y ni siquiera que del encuentro salga un calendario o la composición de la mesa de negociación que se constituirá posteriormente de acuerdo al pacto suscrito por PSOE y Unidas Podemos.

“La solución al conflicto catalán es compleja, va a requerir tiempo, inteligencia y empatía”, ha admitido Montero, que ha enmarcado esta reunión en un “primer contacto” en el que abordar cuestiones del “día a día”. A partir de ahí, la pretensión es que se reúna la mesa de diálogo. Sánchez acudirá al encuentro acompañado con la ministra de Política Territorial, Carolina Darias, aunque Montero ha asegurado que será exclusivo de los presidentes.

La intención del Gobierno es mantener un “espíritu constructivo” tanto en la reunión de Sánchez y Torra como en la mesa de diálogo que se pondrá en marcha posteriormente. No obstante, el presidente socialista no llevará un plan ni propuestas concretas para la solución del conflicto sino que su voluntad será escuchar al jefe del Govern en sus reclamaciones y, a partir de ahí, dar una respuesta. La Generalitat, por su parte, sí reclama que del encuentro de los presidentes salga un calendario aproximado para las posteriores reuniones, informa Arturo Puente.

Montero ha reconocido que los socialistas están “en las antípodas” de los independentistas, pero ha asegurado que la voluntad es encontrar “puntos de encuentro” que permitan desencallar la crisis territorial. La portavoz ha aprovechado para emular el espíritu de la Transición para defender el alcance de acuerdos.

“Si no se hubieran sentado personas que pensaban distinto nunca hubiéramos podido recorrer este camino –ha expresado Montero–. Cuando se sentaron el señor Suárez y el señor Carrillo se encontraban en las antípodas del pensamiento, pero fueron capaces de trazar puntos de encuentro”. La ministra se ha referido a cuestiones como la economía social, el papel del Ejército e incluso la Corona para dejar claro que si los políticos de la Transición fueron capaces de llegar a un entendimiento para la Constitución, los actuales tendrán que serlo para resolver el problema de Catalunya.

Montero ha mostrado su confianza en que la reunión de los presidentes sirva para abordar asuntos comunes de la gestión de la política catalana y lograr avances “en temas concretos” como la “situación delas inversiones, posibilidades de colaboración entre gobiernos o los trenes de cercanías”, según ha explicado en una conversación informal con los periodistas tras la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.

La portavoz y ministra de Hacienda también ha reconocido que espera que la Generalitat acuda a la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera que ha convocado para este viernes. “Nuestra pretensión es que todas las comunidades autónomas participen”, ha dicho Montero, que ha recordado que a la última cita asistió un miembro del equipo de Pere Aragonès, que es quien tiene las competencias de Economía del Ejecutivo catalán. No obstante, solo los consejeros tienen derecho a voto en ese órgano multilateral en el que están representados el Gobierno y las autonomías.

“Afecta de lleno a los ciudadanos de Catalunya. Sería bueno que pudiera participar”, ha zanjado Montero sobre la reunión en la que el Gobierno expondrá la propuesta para la senda de déficit hasta 2023 y en el que se discutirá “la distribución de esfuerzos” entre el Estado y las comunidades. “Ojalá la normalidad institucional sea la nota dominante que empiece a presidir las relaciones entre el Gobierno y la Generalitat”, ha expresado.