Obama insta a republicanos a votar hoy la ayuda para damnificados por “Sandy”

El presidente de EE.UU, Barack Obama, instó a los republicanos, mayoritarios en la Cámara de Representantes, a que voten hoy y aprueben “sin demora” un plan de ayuda para los damnificados por el huracán “Sandy” de octubre pasado.

El plan fue aprobado por el Senado de Estados Unidos, con apoyo bipartidista, la semana pasada, pero la Cámara de Representantes no lo sometió a votación el martes.

“La Cámara de Representantes se ha negado a actuar, aun cuando hay familias y comunidades que todavía necesitan nuestra ayuda para reconstruir en los meses y años venideros, y que aún necesitan apoyo de inmediato cuando nos queda el grueso del invierno por delante”, destaca Obama en un comunicado emitido por la Casa Blanca.

“Cuando golpea una tragedia, los estadounidenses se unen para ayudar a los necesitados. Insto a los republicanos en la Cámara de Representantes a que hagan lo mismo, sometan esta importante solicitud a un voto hoy, y lo aprueben sin demora”, enfatizó el mandatario.

La ayuda adicional solicitada por la Casa Blanca tiene el objetivo de contribuir a las tareas de limpieza y reconstrucción en la zona costera afectada por el huracán a finales de octubre pasado, en particular en los estados de Nueva York, Nueva Jersey y Connecticut.

El martes, el presidente de la Cámara Baja, el republicano John Boehner, suspendió la votación del plan de ayuda, lo que originó la airada protesta de miembros del Congreso que representan a los damnificados.

Su portavoz, Kevin Smith, afirmó que Boehner “está comprometido con el esfuerzo para que la legislación se apruebe este mes”.

Según fuentes legislativas, los legisladores de Nueva York y Nueva Jersey tienen previsto reunirse hoy con Boehner y con el republicano número dos de la Cámara Baja, Eric Cantor, para discutir el voto sobre el plan de ayuda.

“Sandy”, que se abatió sobre la región atlántica de Delaware, Nueva Jersey, Nueva York y Connecticut, causó un centenar de muertos y daños por valor de miles de millones de dólares, y paralizó el tráfico en una de las regiones de mayor densidad demográfica en EE.UU.