El Observatorio pide considerar violencia machista los abusos y violaciones cometidos fuera de la pareja

El Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial ha emitido un informe en el que reclama un cambio legal para que los abusos y violaciones cometidos fuera de la pareja también sean considerados violencia machista a nivel judicial. Este organismo entiende que la Ley de Violencia de Género de 2004 debe ser reformada para que los juzgados especializados en violencia sobre la mujer investiguen los casos de violencia sexual aunque los acusados no sean parejas o exparejas de las víctimas. Esto permitirá, junto con una mayor inversión en medios judiciales, perseguir de una manera “más efectiva, exhaustiva y profunda” la violencia sexual en nuestro país.

Las integrantes del Observatorio, presidido por la vocal María Ángeles Carmona, hace esta petición después de que el órgano de gobierno de los jueces haya estudiado las 102 sentencias sobre delitos de violencia sexual dictadas por la sala segunda del Tribunal Supremo a lo largo de 2020, recopiladas el pasado mes de noviembre. Un estudio que revela, por ejemplo, revela que en 9 de cada 10 casos el autor de estos delitos es un hombre y la víctima una mujer en 8 de cada 10. Sin embargo, destaca el CGPJ, menos de un 7% de estas causas son investigadas por juzgados especializados de violencia sobre la mujer, algo que según dice el Observatorio “merma la eficacia en la lucha contra este tipo de delincuencia”.

Según los datos del CGPJ, en España existen 106 juzgados de instrucción especializados en violencia contra la mujer, otros 32 más de lo penal donde celebrar juicios además de otros 351 compatibles. El propio organismo advierte en su informe de hoy que serán necesarios más para hacer frente a esta posible reforma legal. “Debería ir acompañada por el aumento del número de juzgados de violencia sobre la mujer, que verían ampliada su competencia a todos los nuevos delitos comprendidos en el ámbito de la violencia de género”, dice el Observatorio. Los datos del Registro de Delincuentes Sexuales, del Ministerio de Justicia, revelan que en 2019 hubo 2.635 hombres y 73 mujeres cumpliendo condena por distintos delitos de violencia sexual.

Una solución, para el Observatorio, es modificar el primer artículo de la Ley de Violencia de Género de 2004, que ciñe el concepto de violencia machista a todo tipo de agresiones cometidas sobre “quienes sean o hayan sido sus cónyuges o de quienes estén o hayan estado ligados a ellas por relaciones similares de afectividad, aun sin convivencia”. Este concepto excluye, por tanto, los abusos o violaciones cometidos por extraños o por familiares que no sean pareja de la víctima. Según un estudio de la Fundación ANAR, más del 50% de los abusos sobre menores tienen lugar en el hogar y por familiares como padres, tíos, primos o las parejas de la madre. Los datos del CGPJ explican que un 33,6% de los menores abusados son víctimas de estos delitos en el ámbito familiar.

Para el CGPJ, es necesario que el concepto de violencia sobre la mujer se amplíe a la violencia sexual cometida por hombres que no sean pareja o expareja de la víctima. “El actual concepto cerrado de violencia sobre la mujer es insuficiente para estudiar y combatir con efectividad este fenómeno criminal”, dice el Observatorio, en base al Convenio de Estambul firmado por España en 2011. El Convenio no hace esta diferenciación que sí hace la Ley española de 2004.

Que los juzgados de violencia sobre la mujer asuman este tipo de investigaciones debe ir acompañado de otras reformas además de un aumento de la plantilla. Reclama el Observatorio: “La elaboración de perfiles de las víctimas menores más vulnerables para la detección precoz del riesgo; la revisión de los protocolos escolares para una mejor detección de la violencia sexual sobre niñas y niños y, con el mismo fin, la mejora de la coordinación entre operadores jurídicos, médicos y centros escolares; y apuesta por la elaboración de planes de formación específicos para jueces y magistrados en materia de violencia sexual sobre menores de edad”. 

 Esta medida permitiría, según el CGPJ, “tener una visión más detallada de esta tipología delictiva desde el punto de vista del análisis jurídico y una instrucción de los procedimientos más ágil”. En los casos de víctimas menores, más del 70% de los casos analizados en el estudio, añade el CGPJ: “Se podría comprobar la evolución de la conducta delictiva (abuso sexual o agresión sexual), habida cuenta de que con frecuencia se prolonga durante años hasta que se producen los episodios más graves”.

Uso de nuevas tecnologías para delinquir

El Observatorio pone el foco sobre las bajas cifras de condenas por delitos sexuales, por ejemplo, a través del uso de las nuevas tecnologías. “El Observatorio considera necesario hacer un análisis de las razones por las que tales fenómenos no están siendo denunciados o no están siendo investigados correctamente, pese a estar tipificados como delitos desde hace años, y propone llevar a cabo actividades formativas específicas sobre delitos sexuales con víctimas menores de edad”, explica el comunicado del órgano de gobierno de los jueces.

También propone detectar de una manera más precoz el riesgo de las víctimas de sufrir violencia sexual a través de perfiles pero sin descuidar la vigilancia y tutela de los menores: “Resulta imprescindible fortalecer la coordinación con otros sectores sociales y, de forma específica, con pediatras y médicos de atención primaria y colegios”, dice el informe. Sólo el 6% de los casos en menores de edad fueron detectados a través de protocolos escolares. Unos centros que, según el CGPJ, “deben ser, de hecho, ”punta de lanza“ en la detección de las situaciones de violencia sexual sobre menores de edad”.