Pablo Iglesias, con Mongolia: “El PP se ha convertido en una fábrica de corruptos”
La repetición electoral ha supuesto que la revista satírica Mongolia recupere sus coloquios con políticos, una charla que mezcla, como en la publicación mensual, la actualidad y el humor más ácido en un teatro y con la participación de un destacado líder político. Si antes del 20 de diciembre fueron Alberto Garzón, Juan Carlos Monedero o Eduardo Madina quienes se sometieron a las preguntas de Pere Rusiñol, Edu Galán y Darío Adanti, este martes ha sido Pablo Iglesias.
El secretario general de Podemos, en un tono muy “institucional” como él mismo ha reconocido, ha analizado el panorama electoral que se abre de cara al 26 de junio, ha defendido la confluencia alcanzada con IU y ha tendido la mano al PSOE, a quien considera un partido imprescindible y del que Unidos Podemos deberá ser aliado tras los comicios para desbancar al PP.
El partido de Mariano Rajoy ha sido el principal objetivo de los dardos de Iglesias. El líder de Podemos ha querido distinguir entre la formación que lidera Pedro Sánchez y el PP. Tras recordar que su familia tiene pasado socialista y que su abuelo colaboró con el dirigente de la II República Indalecio Prieto, Iglesias ha insistido en que tras el 26J será necesario un entendimiento con el PSOE, sea cual sea la fuerza que quede por encima. Y ha rechazado que su destino sea terminar como el Pasok griego: “Estamos obligados a considerar al PSOE un aliado. Va a seguir siendo un partido fundamental en España”, ha asegurado.
El cambio de discurso sobre lo que Iglesias y otros dirigentes de Podemos decían sobre el PSOE en 2014 es evidente. Con el PP no lo hay: “El presente del PP tiene que ver con la gestión corrupta de la política”, ha respondido tras ser preguntado por los orígenes franquistas del partido de Rajoy. y ha añadido: “Se ha convertido en una fábrica de corruptos”. Iglesias también ha calificado de “burla completa” que la fianza impuesta al PP por su implicación en el caso Bárcenas acabe saliendo de los bolsillos de los contribuyentes.
Pablo Iglesias también ha repasado el proceso de confluencia, las diferencia internas en Podemos al respecto y el papel que Podemos e IU tendrán durante esta campaña. El líder de Podemos ha reiterado además que, en función del resultado, el proceso de confluencia puede ir a más. Una idea que basa en su buena sintonía con Alberto Garzón y que ya dejó clara en una entrevista en eldiario.es.
Iglesias ha explicado a preguntas de los espectadores el desacuerdo de Podemos con el Pacma y su visión de cómo la tauromaquia llegará a su fin “por consenso” de la sociedad y no por una imposición.
El secretario general de Podemos, que en los primeros compases del coloquio se ha mostrado un poco encorsetado posiblemente por la experiencia previa con Mongolia de Monedero, se ha soltado al final de la hora larga de charla y ha bromeado con la posibilidad de llevarse a vivir a La Moncloa a uno de los contertulios, Darío Adanti. El dibujante argentino le ha preguntado varias veces por la postura de Iglesias ante la penalización de drogas como las derivadas del cannabis. El líder de Podemos se ha mostrado favorable a la despenalización del hachís y la marihuana y ha lamentado que España sea “un país donde te puedes comprar una botella de tequila pero te persiguen por fumar un porro”.
Algo menos de 100 personas han llenado una de las salas de los Teatros Luchana de Madrid para asistir como público a la charla, cuyas entradas se agotaron en minutos.
Entre los asistentes, una veintena de periodistas, lo que probablemente no ha ayudado a que Iglesias se haya desenvuelto con más naturalidad, una mayoría de personas jóvenes y un rostro muy conocido: el del cineasta José Luis Cuerda.
