Pedro Sánchez: “El cambio no tiene intermediarios”
El PSOE ha firmado una tregua interna para escenificar una imagen de buen rollo y partido unido, agarrado a la idea de “el cambio” como gran apuesta de campaña para el 26J. Pedro Sánchez ha conseguido reunir en torno a su candidatura a Susana Díaz y al resto de presidentes en comunidades autónomas gobernadas con sus siglas, en el gran acto de campaña que este domingo les ha reunido en el pabellón que la ONCE tiene en el madrileño paseo de La Habana. También se ha convocado a históricos dirigentes como Zapatero, Almunia o Alfredo Pérez Rubalcaba.
El PSOE quiere recuperar el voto perdido en las urnas a favor de Ciudadanos y Podemos. Sánchez ha reafirmado esa idea afirmando que “el cambio no tiene intermediarios”. Según el candidato socialista, “si el PSOE gana las elecciones en una semana habrá Gobierno”. Sanchez asegura: “Seré generoso, todo lo que no han sido conmigo”.
Durante su discurso, el candidato socialista ha asegurado que “si el PSOE no gana las elecciones en España no habrá cambio”. En clara referencia a Podemos ha recordado que su partido no ha necesitado de otras siglas para mejorar sus expectativas electorales: “Al paso que van algunos se van a tener que presentar con papeletas apaisadas”, afirmó.
Rajoy o Pedro Sánchez. Esa es la idea con la que el PSOE quiere llegar a las urnas. El plan se ha puesto en marcha el día en el que una nueva encuesta situaba sus expectativas electorales por debajo de la coalición entre Podemos e Izquierda Unida. “Ya saben los españoles quienes trabajamos por el cambio y quienes bloquean el cambio”, señaló el candidato socialista en referencia al fracaso de las negociaciones para formar Gobierno.
La intención de los socialistas es insistir en la idea de que existe un sello con su marca y que España ha mejorado gracias a él. Las constantes alusiones a la palabra cambio han sido incontables y todo hace pensar que así seguirán las cosas durante las semanas de mítines que quedan por delante hasta el 26J.
A la derecha de Sánchez se ha sentado el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, con quien ha intercambiado tímidos gestos de un afecto cuya escasez es conocida en todo el PSOE. Antes de arrancar los discursos y, a través de conexiones en directo, se sucedieron las intervenciones de todos los presidentes autonómicos del PSOE y de los exsecretarios generales Joaquín Almunia y Alfredo Pérez Rubalcaba. En el capítulo de las ausencias, destacó la de Felipe González que, a través de un video pregrabado, aseguró que Rajoy “es una tortura inmerecida para los españoles”.
Por lo demás, los argumentos del PSOE poco difieren de lo ya oído en la campaña anterior: derogación de la reforma laboral, paralización de la LOMCE, etc. El candidato socialista ha conseguido el apoyo de su partido para para unas elecciones en las que el PSOE no quiere evitar a toda costa la idea de segunda vuelta. “”El PSOE sale a ganar las elecciones y no vamos a afrontarlas pensando en lo que pudo ser y no es“, concluyó el candidato socialista.