Sube a 9 el número de muertos por la tormenta que azota el Cabo sudafricano

Un total de nueve personas han muerto ya como consecuencia de la tormenta que desde ayer azota el sur de la provincia sudafricana del Cabo Occidental, informaron hoy las autoridades locales.

“Hemos encontrado el cuerpo de un niño de tres años, lo que eleva a nueve el número de fallecimientos desde que comenzó este desastre”, dijo desde Ciudad del Cabo en una conferencia televisada el consejero del gobierno provincial Anton Bredell.

Seis de las víctimas murieron en Ciudad del Cabo -la capital provincial y la segunda urbe sudafricana, donde la lluvia y los fuertes vientos dañaron numerosas escuelas y cortaron la electricidad en varias áreas- y sus inmediaciones.

El resto de víctimas perdieron la vida a causa de un incendio descontrolado por los fuertes vientos en la localidad de Knysna, situada unos 500 kilómetros al este de Ciudad del Cabo y que tiene poco más de 50.000 habitantes.

Entre 7.000 y 8.000 personas se han visto obligadas a abandonar sus casas debido al fuego, que ha afectado a más de 800 poblados chabolistas.

Con la ayuda de las nuevas precipitaciones que han caído en la región, los bomberos siguen intentando controlar el fuego mientras persisten los fuertes vientos, cuya acción de propagación del fuego ha llevado a la destrucción de barrios enteros en Knysna.

Las autoridades han ordenado el despliegue del Ejército en la zona para luchar contra las llamas.

“Estamos intentando controlar la situación y salvar tantas vidas como sea posible”, añadió Bredell, que informó también de graves daños provocados por la tormenta y el incendio en hospitales y otras infraestructuras públicas.

La tormenta que vive el Cabo es según las autoridades la peor en tres décadas, y llega días después de que el Gobierno regional declarara el estado de “desastre nacional” en la zona a finales de mayo por una de las peores sequías que se recuerda.

Desde que comenzara la tormenta, muchos sudafricanos han colgado fotos y vídeos en Twitter bajo el hastag #CapeStorm y #KnysnaFires para mostrar los efectos del temporal.