La Xunta estableció en su protocolo para el curso escolar una vía para que los docentes puedan pedir que se les considere especialmente vulnerables a la COVID-19 si tienen determinadas enfermedades, por edad o durante el embarazo. En estos casos, deben adoptarse medidas de protección específicas.
Poco más de un mes después del arranque del curso escolar, retrasado en Galicia precisamente para que los centros se adaptasen a las medidas de prevención, han empezado a llegar respuestas calcadas a profesores a los que la Consellería de Educación les niega el reconocimiento de una sensibilidad mayor al virus sin haberles solicitado antes informes médicos.
Escribe Beatriz Muñoz.