El pacto de la estabilidad que visibiliza al PP: 30 millones, impuesto de Sociedades e IRPF
El consejero de Hacienda del Gobierno vasco, Pedro Azpiazu, y el portavoz económico del PP, Antón Damborenea, han firmado este miércoles en el Parlamento con una representante del PSE-EE, Alexia Castelo, y otra del PNV, Jone Berriozabal, como testigos, el acuerdo que posibilitará la aprobación de los presupuestos autonómicos de 2018. Los 'populares' ganan influencia respecto al 2017 al movilizar 30 millones frente a 29 y, sobre todo, al haber logrado cambios de calado en la política fiscal vasca que se articularán en forma de enmiendas conjuntas de los tres partidos en las Juntas Generales de Álava, Bizkaia y Gipuzkoa.
La firma de un acuerdo alcanzado en gran medida anoche y cuyos detalles se han redactado a lo largo de la mañana se ha producido a las 13.00 horas en una pequeña sala de la tercera planta de la Cámara vasca que antes se utilizaba como almacén. Sonrientes, Azpiazu y Damborenea han repetido el apretón de manos de hace unos meses. “Bene benetan”, ha agradecido el consejero nacionalista el apoyo del PP a las cuentas, lo que permite lanzar un mensaje de “responsabilidad y estabilidad”.
Presupuestos: el PP se queda en la abstención
En cuanto a los presupuestos, según el texto del acuerdo, “el grupo parlamentario Popular Vasco-Euskal Talde Popularra presentará enmiendas [al proyecto original del Gobierno] hasta un máximo de 30 millones de euros”. Según ha explicado Damborenea en rueda de prensa -todas esas partidas se conocerán con detalle el jueves a mediodía-, el grueso de ese dinero (el 0,26% del presupuesto total) irá a parar a Sanidad (5 millones para conciertos, inversiones en infraestructuras y asociaciones de familiares de enfermos), a empleo (1 millón), al comercio minorista (2 millones), a Educación (5 millones para conciertos, FP dual, AMPAs e institutos con alto porcentaje de alumnado extranjero) o a incrementar un 10% la Justicia gratuita.
Asimismo, y como adelantó eldiarionorte.es, el PP ha logrado que el Gobierno de PNV y PSE-EE acceda a eliminar el recorte del 7% introducido en 2011 en las ayudas para las familias por nacimiento de hijos y para conciliación. Habrá una enmienda al articulado que dejará esa reducción en el 5% en 2018 y un compromiso de que baje hasta el 0% de cara a 2020. Asimismo, la dotación de las ayudas en sí misma crecerá en 3 millones de euros en 2018 respecto a 2017. Los cambios no se harán extensivos a la renta de garantía de ingresos (RGI) que sufre ese mismo recorte del 7% desde 2011.
Finalmente, las cuentas recogerán medidas para iniciar el estudio de algunas infraestructuras como la nueva línea de metro en Bilbao hacia el barrio de Rekalde, la conexión con el aeropuerto de Loiu y la reforma del estadio de Mendizorroza como demanda el presidente de el grupo Baskonia-Alavés Josean Querejeta.
Damborenea ha matizado que este acuerdo no supondrá el 'sí' del PP a las cuentas del Gobierno de Iñigo Urkullu. “En principio la idea, salvo que se pueda mejorar alguna cosa, será la abstención”, ha explicado el representante del PP sobre el sentido del voto de su partido en los debates presupuestarios. Para el Gobierno, esta abstención en suficiente ya que PNV y PSE-EE tienen 37 escaños por 29 de EH Bildu y Elkarrekin Podemos, que votarán 'no' y que se han mostrado muy críticos tanto con las cuentas del Ejecutivo como, sobre todo, con el acuerdo con los 'populares'.
Reforma fiscal: el Impuesto de Patrimonio más barato
El acuerdo a tres bandas también acarreará novedades en la política fiscal vasca. Los detalles se han cerrado en Álava, donde PNV y PSE-EE necesitan del concurso del PP, pero se harán extensivos automáticamente a Bizkaia y Gipuzkoa también. El cambio fundamental, ya conocido, es la bajada en dos años del Impuesto de Sociedades del 28% al 24%, un punto menos que en el resto de España.
Fuentes del PP han añadido que hay acuerdo también para que las empresas tengan 20 años de margen (y no 15) para compensar bases negativas hasta un máximo del 70% para 'pymes' y 50% para grandes empresas. Asimismo, las sociedades podrán descontar de la cuota líquida las inversiones en I+D+i hasta alcanzar el 70%, tal como se preveía en la propuesta PNV y PSE-EE.
En cuanto al Impuesto de Patrimonio, quedará homogeneizado en todo el País Vasco al nivel de Bizkaia, el más “barato” de los tres territorios en este terreno. Gipuzkoa, asimismo, retomará el denominado “escudo fiscal” de modo que quienes sólo declaren patrimonio y no renta no vean mermada su situación económica al cierre del ejercicio.
Finalmente, el mayor escollo negociador ha sido el IRPF. Sólo hay retoques en las deducciones por hijos y dependientes a cargo (del 1,5% más) y para el alquiler juvenil de viviendas (del 25 al 30%), así como un compromiso de “flexibilizar” para los autónomos el fraccionamiento de pagos. En Álava, eso sí, habrá un 'plus' fiscal para evitar la despoblación de la zona rural (municipios de menos de 5.000 habitantes) con deducciones especiales para vivienda (+20% respecto a lo ordinario) y para familias con hijos y mayores a su cargo (+20% también en relación a la media). El PP, en todo caso, ha arrancado a PNV y PSE-EE el compromiso de abordar una reforma general del IRPF de cara a 2020.
