Gobierno vasco participa en la sesión constitutiva del nuevo Comité de las regiones de la Unión Europea

La secretaria general de Acción Exterior, María Ángeles Elorza, participa este miércoles en Bruselas en la sesión inaugural del sexto mandato del Comité de las Regiones, donde defenderá 17 enmiendas en materia medioambiental y laboral propuestas por el Gobierno vasco.

En un comunicado, el Ejecutivo vasco ha informado de que este pleno, que se celebra entre este miércoles y el jueves en la capital comunitaria, da inicio a una nueva legislatura del Comité de las Regiones por un periodo de cinco años.

Tras las elecciones al Parlamento Europeo celebradas en mayo del pasado año, el comité debe renovar todos los cargos y elegir a su nuevo presidente, además de adoptar su programa político y constituir las distintas comisiones de trabajo.

Asimismo, ha informado de que este órgano está integrado por 350 miembros, entre ellos, 15 presidentes autonómicos y dos consejeros en representación de las comunidades autónomas. En el caso de Euskadi, el lehendakari, Iñigo Urkullu, renueva como miembro titular y María Angeles Elorza como miembro suplente.

En la sesión plenaria intervendrá el vicepresidente primero de la Comisión Europea, Frans Timmermans, la comisaria de Comercio, Cecilia Malmström, así como la secretaria de estado para Asuntos Europeos de Letonia, Zanda Kalnina-Lukasevica, en representación de la Presidencia letona.

ECONOMÍA CIRCULAR

Según ha informado el Gobierno vasco, durante estos dos días se analizarán distintas iniciativas europeas sobre las que el Ejecutivo de Iñigo Urkullu presenta un total de 17 enmiendas en materia medioambiental y laboral.

En concreto y sobre el futuro paquete de medidas de la UE a favor de una economía circular, --que se basa en reciclar para reducir la producción de residuos y convertirlos en materias primas--, el Gobierno vasco defiende que la transición hacia una economía circular “exige un planteamiento de prevención de residuos y de reutilización, que tenga en cuenta toda la cadena de valor y que incida especialmente en el fomento del uso de materiales reciclados”.

Además, destaca la importancia de “dar una salida comercial” a los materiales recuperados de los residuos y a los productos fabricados con ellos, de forma que se cree un marco jurídico unitario y oportunidades equitativas para todos aquellos que lo realicen.

Sobre la responsabilidad del productor, pide que se mantenga la obligación de fomentar la ecoeficiencia y el ecodiseño, incluyendo la reparabilidad, la preparación para la reutilización y la reciclabilidad de componentes y materiales, de manera que podamos extender la vida útil de los productos o que éstos puedan ser devueltos a su uso una vez convertidos en residuos.

Por último, considera que para controlar el cumplimiento de los objetivos de reciclaje marcados desde Europa, la Comisión Europea debería de proporcionar, además de criterios objetivos de evaluación, apoyo metodológico para garantizar la homogeneidad de las evaluaciones de los informes anuales que se realicen).

SALUD Y SEGURIDAD LABORAL

En relación al Dictamen sobre el Marco Estratégico de la UE para la salud y la seguridad en el trabajo 2014-2020, el Ejecutivo vasco estima que el modelo organizativo de trabajo en red que propone la Comisión Europea debe integrar a los agentes de la prevención a nivel regional y local, que son más próximos a las realidades productivas diferentes.

Asimismo, plantea no sólo homogeneizar las normas, sino también los modelos en materia de salud y seguridad en el trabajo, “dado que son los que materializan en la práctica los dictados de las normas”.

En lo que se refiere al Plan de acción ecológico para las pymes y la Iniciativa de Empleo Verde de la UE, el Gobierno vasco sugiere que se establezcan mecanismos de discriminación positiva en favor de las empresas que respeten los principios de la economía verde, no sólo a través de la reducción de las tasas e impuestos locales, sino a través de la utilización de la contratación pública.

Además, en relación a la opinión de la Comisión de plantear la imposición de tasas e impuestos medioambientales, el Gobierno vasco constatará que deben ser instrumentos para impulsar la corresponsabilidad medioambiental, cuyo fin no debe ser recaudatorio, sino de mejora del comportamiento ambiental de aquellos a los que se aplique.

El Gobierno vasco propone que se fomente la utilización de sistemas de gestión ambiental, y en especial del sistema europeo EMAS, con el fin de incorporar la cultura ecológica en la toma de decisiones por las empresas, mejorando así la eficacia de su funcionamiento y la información al público sobre su comportamiento ambiental.

También se ha mostrado a favor de la creación de un certificado común europeo para la economía verde y considera que a largo plazo, no sólo aportaría previsibilidad, sino también seguridad jurídica, ya que sería posible conocer de antemano la interpretación legislativa en casos muy variados de discrepancia jurídica.