Netanyahu pide a un ministro que aplace el proyecto de anexión de una colonia

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha pedido al ministro de Educación y líder del partido pro colonización Hogar Judío, Naftalí Bennet, que aplace un proyecto de ley para la anexión del asentamiento de Maalé Adumim con el fin de no provocar tensiones con el nuevo gobierno en Estados Unidos.

Netanyahu, que quiere estrechar relaciones con la administración de Donald Trump, telefoneó el viernes a Bennet para pedirle que no presente hoy el proyecto de ley, sino que espere a que se comencen las relaciones de trabajo con los asesores de Trump, informan varios medios locales.

El diario Yediot Aharonot afirma en ese sentido que estos le han pedido a Netanyahu que no adopte medidas unilaterales en relación con el conflicto palestino-israelí, sino que cualquier decisión la coordine con ellos.

Con más de 40.000 colonos, Maalé Adumim se encuentra en territorio palestino a unos ocho kilómetros al este de Jerusalén, y ha sido elegida por los grupos pro-colonización como proyecto piloto de una campaña de anexión unilateral de las tierras que Israel ocupó en 1967.

Portavoces oficiales palestinos han advertido de que en ese caso, o en el de que Washington decida trasladar su embajada de Tel Aviv a Jerusalén, como dejó entrever Trump en su campaña electoral, supondrá el fin de cualquier intento negociador.

El proyecto de ley, redactado por un diputado del Likud y otro de Hogar Judío, está registrado a debate en la sesión de hoy de la Comisión ministerial de asuntos legislativos, primera instancia de las leyes que fomenta el gobierno.

Bennet aún no ha confirmado si aplazará el debate, pero el Yediot Aharonot revela que quiere a cambio una declaración de Netanyahu acerca de que abandona formalmente las líneas del llamado “Discurso de Bar Ilán”, en el que en 2009 se comprometió públicamente con la solución de dos estados para dos pueblos.

Refrendada por la comunidad internacional en la reciente Conferencia de París, la solución define la creación de un estado palestino en Cisjordania y Gaza con capital en Jerusalén Este y pequeños canjes territoriales.

Para Israel, la solución de dos estados no incluiría Jerusalén este, porque considera esa ciudad su “capital eterna e indivisible”.

Pero Bennet rechaza la creación de cualquier entidad soberana e independiente palestina y aboga por la anexión de todos los territorios, dejando a los palestinos los pequeños cantones autonómicos que tienen hoy.

“Mi objetivo estratégico es bajar a Netanyahu del 'Discurso Bar Ilán'. Es la prueba de toda una vida para Netanyahu. Puede ser recordado en la historia como el líder que salvó a Israel de un 'Hamastán' (estado gobernado por el movimiento islámico Hamás)”, dijo Bennet a sus allegado según el citado diario.