El PP avisa de que 'mailing' es su línea roja en negociación del gasto electoral

El portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, ha advertido hoy de que el 'mailing' es la “línea roja” que tendrá su partido en la negociación con el resto de formaciones políticas para reducir los gasto electorales, porque para los 'populares' es imprescindible que se mantenga.

En declaraciones en el Congreso, Hernando ha señalado que espera que los partidos puedan consensuar un recorte de los gastos electorales y para ello pide “sensatez” y que haya disposición a cumplir unas “reglas comunes para todos”.

Ha recordado que la propuesta del PP es la eliminación de la publicidad exterior y toda la cartelería, así como el recorte de un 30 por ciento del presupuesto de cada partido.

En su opinión, los ciudadanos ya conocen a todos los candidatos -aunque algunos tengan ahora “peor cara” que en diciembre, ha bromeado- y por eso no es necesaria la cartelería exterior.

Y sobre el presupuesto, proponen la reducción del 30 por ciento y advierten de que la propuesta debería ser aceptada por todos.

Lo que no está dispuesto el PP a eliminar es el 'mailing', la “línea roja” del partido según Hernando.

Ha defendido así la “liturgia” que muchos electores quieren tener reflexionando en casa y llevando desde allí su sobre al colegio electoral, además de rechazar esa “cesta de navidad” que proponen algunos cuando hablan de enviar un solo envío con todas las papeletas de todos los partidos.

“Cada partido debe hacer su mailing individualizado, el que quiera, que no es obligatorio”, ha señalado Hernando, quien también ha considerado que en “muchas zonas de España” hay “presión al elector” y por eso muchos prefieren ir con el voto desde casa.

Rafael Hernando ha asegurado que ya hace algunas semanas mantuvo conversaciones con personas de otros partidos y luego se encontró las propuestas “en la prensa”.

También ha reprochado a UPN -“y eso que son mis amigos”, ha dicho- que presuma de haber planteado la reunión cuando al PP le llegó la carta ayer.

En cualquier caso considera que es un asunto en el que todos apuesten por llegar a un acuerdo aunque “cada uno” intente parecer “más puro y prístino que nadie”.