Vox amenaza con meter al servicio de seguridad de las Cortes de Castilla y León en despachos del PSOE para quitar la bandera LGTBI

El presidente de las Cortes de Castilla y León, Carlos Pollán (Vox), ha pedido al PSOE que retire del exterior de las dependencias de su grupo parlamentario la bandera LGTBI+ que ha colocado este martes con motivo del Día del Orgullo que se conmemora este miércoles y ha anunciado que de no hacerlo ordenará a los servicios de seguridad de la Cámara que la retiren.

Como ya ocurrió el pasado año, con Pollán recién llegado al cargo de presidente de las Cortes, el criterio de Vox ha prevalecido para rechazar que la Cámara acoja alguna iniciativa vinculada a los actos conmemorativos del Día del Orgullo, que en años precedentes sí habían tenido cabida, con la proyección exterior de la bandera arcoíris, entre otras medidas.

El Grupo Socialista ya colocó el pasado año la bandera arcoíris como alternativa a la falta de reconocimiento del Parlamento a las personas LGTBI, pero la Presidencia de las Cortes ha explicado a EFE que esta misma tarde ha instado al PSOE a la “retirada inmediata de las banderas colgadas en la fachada del edificio”.

Fuentes socialistas han explicado a EFE que no atenderán la petición de Pollán y han añadido que desconocen si cumplirá su advertencia de la retirada por parte de los servicios de seguridad y en su caso, cuándo lo haría.

El presidente de las Cortes alude a la sentencia 1163/2020 de la Sala Tercera del Tribunal Supremo, que establece que la utilización de banderas no oficiales en el exterior de los edificios y espacios públicos no es compatible con el marco constitucional.

Del mismo modo, Pollán ha aludido a los artículos 105 y siguientes del Reglamento de las Cortes para instar al PSOE a esa retirada y ha advertido de que, “de no ser así, se ordenará que lo hagan los servicios de seguridad de la Cámara”.

El PSOE avisa: no retirará la “pancarta”

Por su parte, el Grupo Socialista en las Cortes, por medio de su portavoz, Luis Tudanca, ha dirigido un escrito a la Presidencia de la Cámara en la que argumenta que no retirará la “pancarta” hasta que no concluya el Día del Orgullo LGTBI.

Y es que, al igual que en años anteriores, en la denominación como pancarta y no como bandera está parte de la argumentación jurídica de los socialista, que han explicado en el escrito que esta pancarta “no contraviene” en modo alguno la ley que regula el uso de la bandera de España y el de otras banderas y enseñas.

Para argumentar su posición, los socialistas recuerdan una Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Aragón que estableció que “la mera utilización de los colores arcoíris y su colocación en el balcón municipal no vulnera la ley de banderas. So pena que considerásemos que también vulneraría esta ley, la colocación de una pancarta con los colores del Real Zaragoza, el día que se festeje el ascenso a primera, o la colocación de una bandera con el color morado el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer”.

“La colocación de la pancarta no viola ley alguna, igual que tampoco lo han hecho las sucesivas proyecciones en la fachada de las Cortes de símbolos y eslóganes con diversos motivos”, ha continuado el escrito de los socialistas, que han recordado que la propia institución, en años anteriores, llegó a iluminar la fachada con los colores arcoíris.

Habrá acciones legales si la retiran por la fuerza

Asimismo, el PSOE ha insistido en que la pancarta del movimiento LGTBI está colocada en dependencias del Grupo Parlamentario Socialista, no en espacios comunes, y que si procediera a irrumpir en los despachos de los parlamentarios para la retirada forzosa de la pancarta, el grupo se verá “obligado a interponer cuantas acciones legales le asistan”.

“Lo que se está realizando es un ejercicio legal de libertad de expresión por parte de los Procuradores y, en ningún caso, puede ser objeto de coacción alguna”, ha concluido el escrito

Las Cortes de Castilla y León se suman a la oleada contra la bandera LGTBI en instituciones gobernadas por Vox o PP, como el veto en el Parlament balear, en los ayuntamientos de Toledo o en el de la localidad granadina de Vegas del Genil, o la exigencia del partido de derecha radical de quitar la enseña arcoíris de la Delegación del Gobierno en Cantabria.