Tres dramas familiares en un tesoro natural a las puertas de Sevilla: “Nos deben nueve nóminas, estamos al límite”

El parque periurbano La Corchuela, incluido en la Red de Espacios Protegidos de Andalucía, es una joya natural a las puertas de Sevilla. Ubicado en el municipio de Dos Hermanas, sus 85 hectáreas conforman uno de los más valiosos pulmones verdes de su área metropolitana, que acoge las visitas de muchas familias para actividades lúdicas y de ocio. Gestionado por la empresa Aema Hispánica SL, concesionaria del servicio de limpieza y mantenimiento del enclave de un tiempo a esta parte los trabajadores están viviendo una situación “dramática, desesperante” que resume uno de ellos, Antonio López. “En este país nos llevamos las manos a la cabeza cuando sube un poco el precio de la electricidad. Pues imagínate llevar nueve meses sin cobrar”.

“Al menos la empresa ahora parece por la labor de solucionar el problema”, dice esperanzado el trabajador a este periódico tras haber pasado en las últimas semanas un par de mediaciones sin éxito en el Sercla. Los representantes de los trabajadores están intentando en última instancia que el Ayuntamiento de Sevilla, entidad mayoritaria en el consorcio que gestiona el parque (también compuesto por Dos Hermanas y Los Palacios y Villafranca) les pague las nóminas directamente a los trabajadores, explica a SevillaelDiario.es Sergio Montero, responsable de Acción Sindical de CCOO de Sevilla.

Aunque los empleados no tienen relación contractual alguna con el Ayuntamiento de Sevilla, la administración local es su penúltima esperanza, dado que la empresa está prácticamente embargada y es incapaz de afrontar los impagos. En principio, no durará mucho la situación en el parque puesto que ya “se ha licitado el nuevo pliego de contratación”, según informan fuentes municipales, y “cuatro nuevas empresas” aspiran a la gestión de este espacio natural, apuntan desde CCOO.

La oruga procesionaria

El sindicato CCOO lleva tiempo acompañando a estos tres empleados. Dos de ellos tienen dos y cuatro hijos a su cargo, respectivamente, mientras que el tercero es un trabajador de origen senegalés con discapacidad auditiva al que una vecina acoge en su casa en estos complicados momentos laborales que se están alargando. Además, la plaga de oruga procesionaria que viene padeciendo el enclave, que alberga pinos centenarios y que ha servido de punto de desencuentro entre gobierno local y oposición, le ha provocado urticaria, si bien parece que la oruga ya en esta época se deja ver menos.

Según comenta Antonio López, hay confianza en que el gobierno local tenga “voluntad política” después de que la empresa haya remitido la documentación “para que no haya problemas legales”. “A ver si se resuelve ya. También se nos deben las pagas extras de verano y navidad”, expresa. En este tiempo, subsisten “gracias a la ayuda de familiares, de amigos, de hermandades, pidiendo una mano en todos sitios”, explica el portavoz, que señala que siguen trabajando a diario de 7.00 a 14.00 en la conservación del espacio natural.

Siguen trabajando pero con una huelga en mente desde hace meses, que se viene aplazando a la espera de que las administraciones ofrezcan la solución que actualmente es inviable por parte de la empresa Aema Hispánica. “Si no llegamos a una solución, nos veremos en la obligación de seguir adelante con la huelga, lo que provocará el cierre durante un mes de un espacio natural muy utilizado por los sevillanos y sevillanas”, viene advirtiendo CCOO, que se ha marcado como objetivos fundamentales el pago de los salarios adeudados, el mantenimiento del empleo y la mejora de las condiciones laborales.

Alternativa judicial

“Somos trabajadores y nos deben nueve nóminas, estamos al límite. Esta semana he tenido que afrontar el cambio de dos cubiertas del coche, que han sido más de 200 euros. La luz, el agua, la hipoteca, el gasoil, la letra del coche... Hay que vivir. La situación es desesperante”, apunta el empleado, que confía en que todo pueda resolverse y se les pague su trabajo.

Fuentes municipales de la capital hispalense consultadas por este periódico muestran su “preocupación” por la situación laboral de estas personas e indican que, dentro de las competencias del ayuntamiento en este sentido, “se ha abierto expediente sancionador a la empresa”. Estas fuentes dicen que el Ayuntamiento está “esperando” a que el sindicato, como afirma, “acredite documentalmente que efectivamente hay localidades que están asumiendo las nóminas de trabajadores en situación similar”.

“También estamos esperando que el sindicato nos comunique fehacientemente la deuda de la empresa con los trabajadores. No sabemos de manera oficial por parte del sindicato cuánto dinero deben a los trabajadores”, añaden, señalando también que trasladaron asimismo a CCOO que “la única posibilidad era que los trabajadores denunciaran en el juzgado”, y que entonces actuaría “como en otras ocasiones: dejando de pagar a la empresa y consignando el dinero en un depósito para afrontar el futuro pago de las nóminas vía juzgado”.