La trastienda de Gesplan, la empresa pública de los 3.000 contratos temporales
¿Bandera de la creación de empleo o un monstruo que absorbe los recursos de la Administración? La empresa pública Gesplan (Gestión y Planeamiento Territorial y Medioambiental), dependiente de la consejería de Medio Ambiente del Gobierno de Canarias, ha experimentado en los últimos años un notable incremento de actividad que ha despertado encendidos elogios por parte del presidente Paulino Rivero, quien llegó a definirla como “la más importante, la que tiene más capacidad para generar puestos de trabajo y desarrollar los planes”, pero también la desconfianza y el rechazo de profesionales del sector privado.
A principios de año, cerca de una veintena de asociaciones y colegios profesionales de las Islas difundieron un manifiesto en el que cuestionaban la política de contratación del Ejecutivo regional y su tendencia a concentrar en sus propias empresas las ofertas para proyectos de consultoría y ejecución de obras, en lugar de someterlas a concurrencia pública.
Gesplan es el paradigma. La empresa pública gestionada por Rafael Castellano ha recibido en el último año unas 300 encomiendas de las administraciones, más del 90% procedentes de distintas consejerías del Gobierno de Canarias, según cifras proporcionadas por el propio organismo. Los proyectos encargados a Gesplan comprenden actuaciones urbanísticas, territoriales, planes de especies amenazadas, de protección de flora y fauna, rehabilitación de espacios turísticos, acciones ejecutivas relacionadas con el medio ambiente y el paisaje o la recuperación de enclaves urbanos deteriorados.
Estas encomiendas se han traducido en un presupuesto de 40,4 millones de euros, siete más que el curso anterior. Rafael Castellano alude a las sinergias para explicar este incremento en época de crisis: “Este año hemos podido aumentar las colaboraciones con Empleo, principalmente, y actuar de forma horizontal con Turismo, Comercio o Medio Ambiente. Esto ha permitido sumar los recursos. El Gobierno de Canarias ha impulsado una actuación muy positiva que es la de sumar energías y sacar gente del paro”.
De los 40,4 millones, Gesplan ha externalizado 12 (un 30%) con subcontratas a todo tipo de profesionales. Del resto, 16 millones han llegado mediante convenios con el Servicio Canario de Empleo (SCE) para la contratación de parados (40%), 11 millones han estado destinados a trabajos internos (27%) y 1,4 a gastos generales (3%).
Actualmente, la empresa pública cuenta con una estructura estable de 154 trabajadores, entre los técnicos (arquitectos, abogados, economistas, ingenieros, geógrafos, biólogos y licenciados en Ciencias del Mar), que conforman el grueso de la plantilla, y administrativos y delineantes. A esta base, que supone una carga salarial anual de 5,8 millones de euros, hay que sumar los más de 3.000 contratos temporales (de seis meses de duración) que Gesplan ha suscrito para acometer las encomiendas de las administraciones en el último año.
Estos números revelan, en palabras de representantes de asociaciones profesionales firmantes del manifiesto contra la política de contratación de la administración, un “cambio en las reglas del juego” y ocultan el oscuro panorama que atraviesan las empresas del sector privado. “Sufrimos en primera persona el problema de la competencia desleal. Gesplan se ha convertido en un agujero negro al que van a parar todos los proyectos que genera el Gobierno, los está acaparando de manera salvaje”, denuncia Federico García Barba, presidente del Colegio de Arquitectos de Tenerife, que explica que en los últimos cuatro años la actividad de las consultoras privadas ha disminuido más de un 90%. “Las pequeñas empresas ya han cerrado y de las más grandes, quedan muy pocas”, apunta.
“Con el 5% de lo que factura Gesplan podríamos vivir seis empresas”, asevera un profesional del ámbito de la ingeniería con despacho en Las Palmas de Gran Canaria.“No es posible que una empresa pública crezca tanto mientras la privada va mermando, el tejido productivo se está cayendo. El Gobierno canario ha creado un monstruo, Gesplan se ha sobredimensionado y se sale de escala para las Islas. Se ha nutrido tanto de personal, que ya no saca nada para la calle”, añade.
Este empresario del sector asegura que, hasta la fecha, han logrado capear la crisis económica gracias al desarrollo de proyectos vinculados al tren de Gran Canaria, que fue adjudicado a tramos por el Cabildo insular. La consultoría que regenta, de escala media, no ha alcanzado en sus siete años de existencia los 300 expedientes, una cifra que Gesplan maneja como media anual.“En 2012 veo las tinieblas”, concluye.
Las asociaciones y colegios profesionales han abierto un camino, aún en estado prematuro, para estudiar si la administración ha incurrido en algún tipo de irregularidad en lo concerniente a la legislación sobre competencia con Gesplan.
Por su parte, Rafael Castellano, el gerente de la empresa, no entiende las críticas de los profesionales. “Me sorprenden, porque nosotros contratamos a una gran cantidad de despachos. Si externalizáramos el 100% de los proyectos, solo podríamos contratar a un 20% de los profesionales que ahora mismo estamos contratando. La cuestión no está en rivalizar, sino en generar complementariedad”, defiende.
Las nuevas ramas de Gesplan
Gesplan ha extendido sus ramas en el último bienio hacia ámbitos que, según los profesionales, se escapan de su misión primigenia: el planeamiento y la ordenación del territorio y del medio ambiente. García Barba, del colegio de Arquitectos de Tenerife, señala que la empresa pública ha ampliado su radio de actuación a proyectos de obra y está actuando “como contratista”.“Mientras, en la calle, hay muchísimos técnicos cualificados sin poder trabajar”, lamenta.
Uno de los planes más ambiciosos que ha emprendido Gesplan recientemente ha sido el de la Modernización, Mejora y Aumento de la Competitividad Turística en el Archipiélago. La encomienda, que arrancó en 2010, comprende actuaciones en todas las Islas, a excepción de El Hierro y La Gomera.
Este sábado, el presidente del Gobierno de Canarias firmaba 76 convenios para el plan de Modernización de San Bartolomé de Tirajana, que pretende acometer las obras necesarias de equipamientos del sector turístico a través de Gesplan. Un encargo que pone en entredicho el futuro del Consorcio de Rehabilitación del Sur de Gran Canaria.“La presencia de Gesplan va más allá de Medio Ambiente u Ordenación del Territorio, ahora asume también competencias en Turismo, que es un sector estrátegico. No tiene límites. ¿Quién es capaz de desactivarlo?”, se pregunta uno de los profesionales consultados por este periódico.