Medio Ambiente investiga el hallazgo de varias palmeras abandonadas en Arrecife
Medio Ambiente sigue investigando la procedencia de las hojas de palmera que se encontraron el pasado viernes en los ventorrillos, que se encuentran junto al Recinto Ferial de Arrecife, debido a que la tala de palmeras lanzaroteñas está muy limitada.
El pasado viernes, los técnicos de Medio Ambiente del Cabildo de Lanzarote se llevaron una sorpresa al pasar por delante de los populares ventorrillos ubicados junto al Recinto Ferial de Arrecife con motivo de los Sangineles. Varias hojas de palmera decoraban estos chiringos, algo que está prohibido a causa de la peligrosa plaga de picudo rojo que acecha a las palmeras desde hace más de un año. Inmediatamente, el área de Medioambiente comunicó al Ayuntamiento la falta, quien se puso en contacto con los tres ventorrillos: el regentado por Alternativa Ciudadana y las murgas Los Desahuciados y Los Gorfines.
“Los ventorrillos retiraron las palmeras ese mismo día, y mostraron desde el principio total predisposición para hacerlo”, explicó el concejal de Festejos de Arrecife, Miguel Ángel Ferrer. El origen de estas palmeras no está claro. Al parecer, se pudieron encontrar abandonadas en los márgenes de alguna carretera, y en la actualidad, se está investigando si pudo ser un despiste o infracción las empresas encargadas de la limpieza, tal y como apuntó el concejal de Festejos.
Desde el ventorrillo de Alternativa Ciudadana, Andrés Barreto explica que “las palmeras se encontraron en el mismo solar donde pusimos el ventorrillo”. “Utilizamos doce o así, pero como las vimos medio secas pensamos que no había peligro”. Al recibir el aviso de Medio Ambiente, tanto la formación política como las murgas se dispusieron a retirar las palmeras.
El picudo rojo
La tala de las palmeras lanzaroteñas está muy limitada desde febrero de 2006, cuando se decidió imponer una serie de medidas cautelares para detener una posible plaga de picudo rojo, que ya había afectado a los palmerales de otras islas.
Entre estas medidas, se imponía la prohibición de cortar palmeras sin el pertinente permiso al Cabildo de Lanzarote. Dos de las salvedades a esta norma serían la tala controlada y supervisada en caso de palmeras que supusieran un peligro o impidieran la visibilidad en las carreteras de la Isla, así como la provisión a los artesanos del palmito.
“Las empresas de limpieza ya conocen perfectamente las normas”, explicó Ferrer. “Si se les pide que corten unas palmeras en una zona concreta, el mismo día tienen que meterlas en el camión, envolverlas, y aunque puedan almacenarlas algunos días, luego las tienen que llevar al vertedero, por eso es extraño que las hayan encontrado en una carretera”.
El pasado año, la utilización de hojas de palmeras para la decoración de carrozas y ventorrillos en la Romería de Los Dolores desató una gran polémica.