Santa Cruz de Tenerife pone fin a las restricciones de agua adoptadas por el incendio forestal
El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife ha puesto fin este miércoles a las medidas establecidas el pasado mes de agosto, ante la necesidad ahorrar agua, a raíz del incendio forestal que afectó a la isla de Tenerife, que ocasionó daños en los canales Río Portezuelo y Trasvase Los Dornajos Baldíos (Aguamansa) que afectaban de manera directa al suministro del distrito suroeste de la capital.
Hasta este miércoles estaba prohibido en todo el municipio, y concretamente, en el mencionado distrito, el llenado de piscinas públicas y privadas, la limpieza de vehículos en servicios de autolavado y en domicilios, los baldeos de agua en patios y azoteas y cualquier otra actividad no esencial que dificultara el abastecimiento de agua a toda la población.
El consistorio municipal ha anunciado que deroga estas medidas tras garantizar “el suministro de agua potable con normalidad a toda la población del municipio”.
Más de 14.000 hectáreas afectadas
El incendio comenzó en la madrugada del pasado 15 al 16 de agosto y se dio por controlado el 11 de septiembre, casi un mes después. El fuego se extendió por una superficie superior a las 14.000 hectáreas en un perímetro de 90 kilómetros, afectando a un total de 12 municipios. Según los cálculos del propio Cabildo, el fuego ha dejado unos daños valorados en más de 80 millones de euros.
La lucha contra el fuego durante la primera semana fue muy duras: el fuego empezó a extenderse por la isla, las condiciones meteorológicas y la orografía dificultaron las labores de extinción, la columna de humo impedía a los medios aéreos trabajar y las llamas alcanzaron alturas inéditas. Nueve días más tarde se dio por estabilizado, es decir, mantenido dentro de las líneas de control y se tardo 18 días más en darse por controlado. En estos momentos, las labores de extinción continúan hasta dar el incendio por extinguido.
0