Una llamada a la Policía Municipal de Valladolid por ruido en una vivienda por una llamada de un vecino, un procedimiento habitual, pero esta vez no había una fiesta. Los agentes se encontraron un cordero lechal vivo en el salón del domicilio, El molesto ruido no era otro que el incesante balido del borrego.
“Llamada por quejas de ruido en una vivienda. No había música, ni fiesta. Solo un ”beee“ constante. Era un cordero lechal Sí, vivo Sí, en el salón”, así ha comentado la intervención la Policía Municipal de Valladolid en un mensaje en la red social X.
El episodio se ha saldado sin detenciones, “solo alguna mirada tierna” y se ha abierto un acta al propietario del cordero, como han reflejado en el mensaje.
Desde la Policía Municipal de Valladolid han recomendado cuidar a los animales y el descanso de los demás y hacen extensible este tipo de llamadas también a los ladridos de los perros, no solo al balido de los corderos.