La Generalitat tratará de parar el nuevo Plan del Ebro en la Comisión Europea
El nuevo Plan Hidrológico del Ebro, aprobado por decreto en el Consejo de Ministros el pasado viernes, ha sido recibido con fuerte rechazo desde diversos sectores en Catalunya. El Govern de la Generalitat anunció ayer su decisión de denunciarlo ante la Comisión Europea, basándose en un informe técnico de la Agència Catalana del Aigua que detecta que el plan es “lesivo contra los fenómenos de la regresión y salinización” en el Delta.
Según aseguró el conseller de Territorio y Sostenibilidad, Santi Vila, la decisión se tomó después de considerar que el plan hidrológico aprobado “entra en contradicción” con la normativa europea en materia medioambiental. Sin embargo, la decisión de la Comisión Europea sobre el Plan Hidrólogico de la Cuenca del Ebro podría hacerse esperar “semanas incluso meses”. Según avanzaron fuentes de Medio Ambiente de la Comisión, Bruselas hará un informe “en profundidad” que tendrá en cuenta “todos los ángulos”.
El decreto aprobado por el Consejo de Ministros, una de las 17 normativas sobre ordenación de cuencas que el Ejecutivo español debe aprobar para cumplir con la directiva europea, establece un caudal por encima de los 3.200 hectómetros cúbicos anuales, menos de la mitad de lo que reclamaba la Generalitat. El consejero de Territorio y Sostenibilidad aseguró que el Plan prioriza las concesiones de agua a los regantes de la parte superior de la cuenca, unas necesidades que la Generalitat considera “artificiales” y “con motivaciones políticas”. Sin embargo, desde el Govern catalán se siguen apoyando las reclamaciones de ampliación del regadió de Lleida. “Los intereses de ambos territorios son compatibles”, zanjó el Conseller, quien consideró que el problema no son los regantes catalanes sino los de otras comunidades.
La Plataforma en Defensa del Ebro avanzó el mismo viernes en que se aprobó el decreto que intentaría parar el nuevo plan en Bruselas, al considerar que vulnera las directivas europeas del agua y de hábitats naturales. También desde la comunidad de regantes de l'Esquerra de l'Ebre se alertó este lunes de las consecuencias que podría tener la aplicación del decreto, que a su juicio puede conllevar la desaparición de hasta un tercio del Delta bajo el mar en 25 años.
Pese a la intención de ser beligernte en los tribunales, el Ejecutivo catalán es consciente de que el Plan nace con fecha de caducidad. Antes del próximo año debe renovarse el plan para cumplir con los requisitos de la Comisión Europea. Según opinó el Conseller, el Gobierno de Rajoy estaría tratando de evitar las sanciones de la CE por incumplir la directiva que obliga a tener planes específicos para las cuencas, “un trabajo que en Catalunya ya tenemos hecho”, apuntó Vila.
La actual postura del Govern de CiU supone un cambio total respecto a la mantenida en 2001, cuando la coalición apoyó desde la Generalitat el polémico Plan Hidrológico Nacional impulsado por el PP. Aquel plan acometía importantes trasvases hacia las zonas secas de la costa mediterránea y dejaba el caudal ecológico por debajo de los 3.200 hectómetros cúbicos. Vila, pero, relativizó el giro de CiU, asegurando que la comparación entre ambos planes es un “anacronismo” porque que “los indicadores sobre la conservación del Delta han empeorado”. “Es un delta más presionado, la regresión está más acentuada y la salinización acreditada”, consideró el conseller catalán.
El Ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, se mostró el domingo abierto al diálogo con las autoridades catalanas pero recordó que el Govern catalán “no se opuso a un caudal de 3.000 hectómtros cúbicos en el primer plan”. El conseller Vila, sin embargo, restó importancia al ofrecimiento de diálogo del Gobierno español. “El Ministerio no ha tenido ningún tipo de contacto con nosotros”, aseguró el conseller, “el único documento que habíamos visto era el de la reunión del Consejo Nacional del Agua, en julio”. También el portavoz parlamentario del Partido Popular en el Congreso, Alfonso Alonso, se refirió al nuevo Plan del Ebro, asegurando que no hay “planes de trasvases encima de la mesa”.
También desde los partidos de la oposición en el Parlament Catalán se mostró rechazo al nuevo plan para la Cuenca del Ebro. La Federación de ERC en el Ebro anunció ayer su intención de presentar en todos los ayuntamientos una moción para rechazar el Plan. Desde Esquerra aseguran que hay que evitar “caer en la trampa” del Gobierno Español, que intenta “enfrentar a los territorios catalanes”. El lider de los socialistas catalanes, Pere Navarro, ha exigido al Gobierno central que establezca un diálogo con Catalunya.
