Malestar en los Mossos por un tuit del jefe de prensa de la conselleria de Interior que reivindica las guerras de 1808 y 1936

Un tuit del jefe de prensa de la conselleria de Interior, Joan Maria Piqué, en el que evocaba las guerras de 1808 y 1936 para pedir la independencia, ha generado malestar en los Mossos d'Esquadra, en los partidos de la oposición y también en el seno de ERC, una de las dos formaciones sobre las que se sustenta el Govern.

En el tuit que ha generado la polémica, el jefe de prensa de Miquel Buch cuelga un cartel del bando republicano de 1936, año del inicio de la Guerra Civil, en el que aparece una mano cargando un arma que llama a la revuelta armada recordando la fecha de 1808, en referencia el levantamiento del 2 de mayo contra las tropas francesas que dio inicio a la Guerra de Independencia. Además de la imagen, Piqué ha escrito: “Quizá es un enfoque que todavía no hemos planteado y funcionaría”.

Piqué ha borrado el tuit una hora después de publicarlo y le ha restado relevancia, pero la polémica ya estaba servida. El sindicato SICME, que representa a los mandos de los Mossos, ha expresado su queja por el tuit de Piqué en otro mensaje en la red social: “Interior necesita gente al frente del departamento de comunicación con capacidad para dar mensajes sensatos y de tranquilidad. Éste no nos representa”.

Por su lado, la portavoz parlamentaria del PSC, Eva Granados, se ha mostrado de acuerdo con el tuit de los mandos de los Mossos y ha añadido: “Un conseller de la Generalitat no puede tener a alguien que enaltece el conflicto armado gestionándole la comunicación. Es indigno de la institución que representa”. El malestar con el tuit de Piqué, periodista ligado siempre a los Governs de Convergència, ha llegado hasta ERC, partido en el que se apoya el Ejecutivo catalán junto a JxCat.

Antes de llegar a Interior en octubre de 2019, Piqué, conocido por un trabajó como jefe de prensa de Artur Mas y en el equipo de Presidència de Carles Puigdemont. Piqué ejerce como director de comunicación de Buch después de que el conseller cesara repentinamente a la periodista Joana Vallès, como cabeza de turco después de que los Mossos anunciaran que usarían gas pimienta para contener las protestas contra el procés.