Más allá del cuscús: los mejores platos de la gastronomía árabe y dónde probarlos en Madrid

¿Te gusta la comida árabe? Si la respuesta es sí, debes saber que hay mundo más allá del cuscús, el hummus, el falafel o el tajín de cordero. En este artículo te contamos otros platos deliciosos de la gastronomía árabe y dónde puedes probarlos en Madrid. Te avisamos de que algunos de sus nombres son impronunciables, esto suele ser una señal de que serán lo suficientemente exóticos como para darles a nuestras papilas gustativas nuevas experiencias, ¡empezamos!

Kibbeh

El Kibbeh es un plato típico que se suele comer en época de Ramadán. Se trata de algo parecido a una croqueta rellena de carne picada y hecha con bulgur. La carne de la que está rellena suele ser de cordero o de vaca, la cual se sofríe antes con cebolla.

Las especias no faltan en este plato, como suelen estar presentes en todos los de la cocina árabe. En este caso destacan el comino y la pimienta. 

Hay familias que lo comen cocinado al horno, otras guisado y otras frito, según gustos y recetas familiares que se van heredando y es típico de Oriente Medio. 

Lo puedes probar en: Shukran. Casa Árabe, C/ de Alcalá, 62. Madrid.

Shawarma

El Shawarma puede confundirse con un kebab, pero tanto el origen como la receta son distintos. Este plato de comida árabe está compuesto de carne de cordero, cortada muy fina y marinada con especias como sal y pimienta en una salsa de vinagre y limón durante 12 horas. 

Estos no tienen por qué ser los ingredientes exactos ya que cada lugar puede tener variaciones en la receta, pero en los recetarios de comida árabe más clásicos puedes encontrar sugerencias parecidas.

La diferencia entre el Kebab y el Shawarma es que aunque la receta es parecida el pan es más fino y es parecido a las tortitas mexicanas con las que se preparan los tacos. Además, la receta en este caso tiene su origen en Turquía. 

Lo puedes probar en: Restaurante Yunie. Calle De Meléndez Valdés, 64, Madrid.

Maqluba

Y pasamos de platos que van bien para una cena o una comida ligera o casi una street food, para pasar a un plato elaborado que suele servirse los fines de semana y comerse en familia.

La Maqluba es un plato de comida árabe típico de la zona de Palestina cuya base es el arroz, a diferencia del típico cuscús que tan fácil es de encontrar en muchos restaurantes árabes de las ciudades más importantes de todo el mundo.

En este caso, el arroz va acompañado de carne, verduras y frutos secos. Algunas versiones incluyen verduras como la coliflor y otras pueden tener variaciones en las verduras poniéndole berenjena y otras similares. La carne de la receta original es de pollo pero también puedes encontrar versiones con cordero. 

Normalmente se sirve con otros entrantes típicos de comida árabe o salsa de yogur para acompañarlo, ¿te atreves?

Puedes probarlo en: Alfanus: Calle Pechuán, 6. Madrid.

Manakish

La siguiente sugerencia de plato de comida árabe que quizás no hayas visto tanto como el hummus o el cuscús es el Manakish.

Se podría decir que es la pizza de El Líbano, ya que su receta original procede de allí. Se trata de una especie de torta de pan con la misma forma que la de una pizza que, al igual que el plato italiano admite muchos ingredientes.

Existe una versión muy sencilla que se prepara con tomillo y zumaque, pero a partir de ahí la lista de ingredientes que casa con la receta es amplia. Desde queso, hasta verduras de todo tipo o carnes. Especiada, por supuesto. En algunas versiones lleva menta.

Este plato de la cocina árabe se cocina en una de esas planchas tan típicas de Oriente que habrás visto en la cocina hindú y pakistaní también. Su versión menos contundente y más sencilla se toma para el desayuno incluso para picar.

Lo puedes probar en: Makan Saj. Calle de Velazquez 118, Madrid.

Rfissa

Pasamos de nuevo a otro plato caliente que es diferente al cuscús. Y es que la base de la Rfissa son las lentejas y la carne de pollo, ¿cómo se prepara? A fuego lento y como casi todo guiso de la cocina árabe, con muchas especias. En este caso se le suele poner una que no es tan común para la mayoría de las personas de Occidente, el el fenogreco (o alholva), planta floral que confiere un sabor especial. 

Después de haberse cocido el tiempo suficiente para que la carne se quede blanda, se sirve colocado sobre hojas de m'semens, una especie de torta de hojaldre.

Puedes probarlo en: Al Mounia. C/ de Recoletos, 5. Madrid (Por encargo)

Halva

Y acabamos con un postre que quizás es bastante distinto de los que puedas ver en la cocina mediterránea o europea por su contundencia y sus ingredientes. Pero, ¿qué sería de una experiencia gastronómica con tantos matices sin un buen postre?

Cuando se trata de probar comida de países distintos, es un placer tomar todo lo que allí ofrecen. Desde los entrantes, hasta los platos principales pasando por los postres típicos. Y es que a través de la mesa se puede conocer la cultura de un pueblo.

El Halva está hecho con sésamo en formato tahín, azúcar y en muchas versiones pedazos de frutos secos como los pistachos. Algunas versiones modernas le ponen chocolate, vainilla o aroma de naranja.

Es bastante más contundente por su base como pueden serlo otros postres, pero también es nutritivo y bastante natural. No es fácil de encontrar en muchos lugares, por eso aquí te dejamos uno en el que seguro lo encontrarás.

Puedes probarlo en: Salamat: Calle del Tribulete, 10. Madrid.

Y después de este viaje gastronómico por los platos de la comida árabe que van más allá del cuscús y del hummus, esperamos que te quedes con una idea de las opciones que tienes a vista de pájaro para ver cuál te llama más la atención, ¡qué aproveche!