Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
La portada de mañana
Acceder
El ataque limitado de Israel a Irán rebaja el temor a una guerra total en Oriente Medio
El voto en Euskadi, municipio a municipio, desde 1980
Opinión - Vivir sobre un polvorín. Por Rosa María Artal
Noticia de agencia

Noticia servida automáticamente por la Agencia EFE

Esta información es un teletipo de la Agencia EFE y se publica en nuestra web de manera automática como parte del servicio que nos ofrece esta agencia de noticias. No ha sido editado ni titulado por un periodista de eldiario.es.

José Ovejero crea un “Mundo extraño”, donde la honestidad absoluta no duele

José Ovejero crea un "Mundo extraño", donde la honestidad absoluta no duele

EFE

Madrid —

0

Quizá porque considera que un mundo “sin máscaras sería invivible”, el escritor José Ovejero ha echado mano del relato corto para descubrirnos su “Mundo extraño” a través de un conjunto de historias de amor y dolor con personajes que disparan honestidad a bocajarro.

“Un mundo en el que no tuviéramos ningún tipo de máscara, de disfraz, de ocultación, sería un mundo invivible. La honestidad en la vida real debe ser limitada; la honestidad tiene que ser absoluta en la literatura, pero no en el mundo real porque creo que nos haríamos un daño innecesario”, cuenta a Efe Ovejero sobre este libro (Páginas de Espuma), que sale a la venta el 7 de febrero.

Y por eso, porque sería “aterrador” que se conocieran todos los pensamientos, el escritor y poeta madrileño (1958) ha vuelto al relato corto diez años después para ofrecernos 14 historias y cinco microrrelatos con protagonistas que encontrarán comprensión o perplejidad “según el lector” que abra el libro.

“Unos lectores verán en estos relatos un mundo aterrador, oscuro, pero es un mundo que está ahí. Lo extraño es darse cuenta -reflexiona- de que para el exterior somos una cosa y por debajo somos otra que a menudo queremos ocultar”.

Por eso Ovejero propone situaciones que parecerían pensamientos restringidos al territorio de lo inconfesable: qué pensaríamos de una mujer que reconoce querer empujar a su marido al vacío, pese a amarlo, solo por el hecho de querer sentirse libre por un momento, o qué diríamos de alguien que en el dolor ve belleza y amor.

Planteamientos “crueles” porque “ahí” es donde quiere “buscar” a sus personajes, es decir, “cuando son lo que son sin ningún tipo de convención ni buenas maneras”.

Pero también reconoce que en estas páginas hay crueldad porque “confronta” al lector con aspectos de sí mismo que “tiende a negar o a no ver del todo”. “Es como iluminar zonas de sombra en las que a lo mejor preferiríamos no adentrarnos demasiado”, añade.

Lo que sucede es que Ovejero ha construido mundos en los que esa crueldad es “perfectamente soportable”, afirma. Primero porque es un libro, “y no la vida real”; y segundo, porque todas las situaciones, narradas en una directa primera persona, van cargadas de humor y “de una cierta distancia irónica”.

El autor de novelas como “Los ángeles feroces” o “La invención del amor” (Premio Alfaguara 2013) ofrece también en “Mundo extraño” una buena dosis de dolor como “parte fundamental de la experiencia”, porque de no existir este sentimiento nos “empobreceríamos”.

“El dolor es una respuesta a cosas que suceden en el mundo que son dañinas, es un aprendizaje. La memoria guarda mucho mejor el dolor que la felicidad, porque nos permite sobrevivir. Si no supiésemos lo que nos hace daño, no sobreviviríamos; no quiero que me lo quiten. Además, me parece que lleva a la reflexión, al autoconocimiento, al conocimiento de los otros”, expresa.

Según recomienda Ovejero, estas historias deberían de ser leídas en orden, porque se trata de un libro que concibió como un todo, después de estar diez años sin acercarse a este género.

Y no lo hizo porque durante este tiempo pensó que “no sabía” hacer relatos cortos que no fueran una “confirmación” de los que ya había hecho hace años.

Porque Ovejero no está en el mundo de la literatura “por la fama”, sino para poder expresar en la ficción lo que no puede en la vida real. “Para mí, la literatura es aprendizaje”, concluye.

Etiquetas
stats