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¿Quién filtró los cuatro episodios de 'Juego de Tronos'? (y sobre todo: ¿tienen más?)

Fotograma de 'Juego de Tronos'

Marta Peirano

La quinta temporada de Juego de Tronos se estrenaba oficialmente ayer por la noche, en 170 países a la vez. El estreno simultáneo obligaba a algunos a volver pronto de la playa, a otros a trasnochar, pero era la estrategia que había elegido la cadena, HBO, para evitar la piratería con la serie más pirateada de la historia de la televisión. Para su amarga decepción, la estrategia le salió rana; cientos de miles de usuarios de la Red descargaron cuatro episodios que fueron filtrados ilícitamente el sábado, 24 horas antes de la hora oficial. Ahora el mundo se pregunta cómo ha pasado, quién ha sido y lo que es más importante: ¿alguien tiene más?

Por cinco pesetas: ¿De dónde salió la copia?

“Lamentablemente, parece que los cuatro episodios filtrados de la próxima temporada de Juego de Tronos se produjeron desde un grupo de gente aprobado por HBO para recibirlos”, decía el comunicado de la cadena norteamericana. Pero podría haber sido cualquiera. Greg Spence, su jefe de postproducción, había sugerido hace poco que lo raro es que no pase más: “El equipo se envía cosas desde todas partes del mundo - le dijo al Denver Post.- Los artistas que trabajan en los efectos especiales trabajan en puntos diferentes del globo. Los archivos tienen marca de agua y los editores tienen que confirmar por escrito que los han eliminado”.

Pero los técnicos trabajan en alta resolución y los episodios filtrados tienen una calidad de 480p que está por encima de estándar de una copia pirata ultracondensada pero por debajo del estreno, que HBO emite en 1080. Las copias en 480p son las que recibe la prensa especializada, críticos de televisión de los grandes medios generalistas y las revistas con sección televisiva, que reciben con antelación un adelanto en DVD para poder publicar sus reseñas el día o los días antes al estreno. Esto significa que no hay más episodios de donde salieron estos. El que los haya visto todos de golpe tendrá que esperar cuatro semanas para reenganchar con el resto.

Los periodistas que reciben los adelantos no son muchos, unas cuantas docenas de personas con nombre y apellidos que firman un contrato de non-disclosure en el que se comprometen a no revelar, compartir o divulgar el material recibido. Ahora HBO está rastreando el itinerario de esas copias ilegales para determinar su origen con exactitud. Cada copia enviada lleva una marca de agua con el nombre de la persona en cuestión pero, como la marca de los archivos filtrados ha sido borrada, el siguiente paso es mirar el registro del servidor donde se compartieron los archivos por primera vez.

Aparentemente, la primera copia ilegal de la quinta temporada de Juego de Tronos apareció en un rastreador de torrents privado llamado IPT, para saltar rápidamente a rastreadores públicos masivos como The Pirate Bay, RARBG y KickassTorrents. Tres horas después, los episodios se habían descargado más de 100.000 veces. A medido que los medios recogían la noticia y las copias se multiplicaban en las redes P2P, las descargas se dispararon hasta llegar al millón.

No todos los P2P son iguales: Torrents públicos y Torrents privados

Las redes P2P funcionan como enjambres descentralizados donde usuarios desconocidos intercambian archivos a través de un protocolo común. Como son descentralizadas, no hay un servidor que sirva el material que se intercambia sino que el contenido se mueve de un sitio a otro sin reconfigurarse nunca por completo. Está en todas partes y en ninguna a la vez, como en una conversación. El rastreador o tracker modera y gestiona la conversación. Y un dato interesante: los rastreadores privados guardan la información de sus usuarios; los públicos no.

El intercambio P2P es un fenómeno masivo, pero no todos participan de la misma manera. La mayoría de los usuarios usan las redes P2P para descargar archivos pero no contribuyen nunca con archivos nuevos. Estos usuarios no son exactamente pasivos; el sistema está diseñado para que cada nodo transmita información, como una neurona haciendo sinapsis en todo momento. Pero la industria ha centrado su persecución judicial en los usuarios que suben material, que son menos del 10%. Los rastreadores privados se crearon para imponer un sistema de karma llamado ratio donde, si no contribuyes de manera proporcionada a tus descargas, te echan de la comunidad.

Para vigilar las contribuciones, los rastreadores privados requieren que los usuarios hayan sido invitados por otro usuario anterior y se registren en la página de la plataforma. Son como clubs privados, generalmente especializados, donde el servidor registra la actividad de cada uno de sus miembros. Hay un sistema de porcentajes que permite saber si el usuario comparte o no los datos que haya descargado o esté descargando. Esto significa que la persona que subió los episodios a IPT está registrada en el sistema y asociada a una IP.

Privacidad vs. HBO

Si un juez permite que HBO tenga acceso a esos registros, la identidad del filtrador será inmediatamente liberada. Si consiguen una orden, contra la compañía o uno de los usuarios, la policía podrá entrar en el precinto de la compañía que regenta el servidor y llevarse físicamente los ordenadores para ponerlos bajo custodia. Si la información está registrada y no ha sido cifrada previamente, cualquier información personal -nombre, email, dirección- conectará a los usuarios con las actividades que hayan realizado en el servidor. Si ese servidor está en EEUU, lo más probable es que consiga la orden. Si está en cualquier otro sitio -como lo han estado los servidores de Pirate Bay o Megaupload- lo más probable es que también.

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