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Las 142 estaciones de tren con menor afluencia de viajeros dejan de vender billetes de forma presencial

El año empieza con bajadas de gas y con subidas en Renfe y autopistas

Marina Estévez Torreblanca

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Las estaciones de tren con menor afluencia de viajeros han dejado de tener venta presencial de billetes desde este 1 de enero. El cierre afecta a 142 estaciones, han informado a eldiario.es fuentes del administrador de infraestructuras ferroviarias, Adif. Se trata de aquellas en las que se suben al tren menos de cien viajeros al día, especifica una nota de prensa de Renfe. La medida, denuncia el sindicato CGT, afecta a 500.000 viajeros.

La clausura de este servicio está relacionada con el proceso de liberalización ferroviaria que será efectiva en diciembre de 2020 en toda la Unión Europea, y por el que empezarán a operar en España operadores distintos a Renfe, explica Adif. Los trabajadores que se encargaban de esta labor de venta de billetes no verán peligrar su puesto de trabajo, ya que su función original es la de regular el tráfico, que es a lo que se seguirán dedicando, afirman las fuentes consultadas.

Hasta el pasado 31 de diciembre, Adif se encargaba de la venta de billetes en medianas y pequeñas estaciones. Lo hacían desde 2005, cuando la empresa estatal española que operaba la red nacional ferroviaria se dividió en dos: el gestor de infraestructuras (como vías y estaciones) Adif y la empresa dedicada específicamente a la explotación de ferrocariles, que mantuvo el nombre original, Renfe.

En 2017 Renfe asumió ya la venta de billetes en grandes estaciones y ahora lo hace con el resto. Pero en las que tienen menos tráfico de viajeros ya no habrá personas en las taquillas.

En un comunicado, explican que asumirán la venta presencial de billetes en aquellas estaciones que dispongan de una media diaria superior a cien viajeros subidos y un volumen determinado de ventas en taquilla que no especifican. Renfe publicará próximamente una licitación para la adjudicación de este servicio.

Al mismo tiempo, todas las estaciones contarán con máquinas autoventa, de forma que se instalarán donde todavía no las haya. Además de estos canales, Renfe pondrá a disposición de los viajeros un número de atención telefónica en las estaciones para resolver todas las consultas y situaciones que puedan plantearse, que estará indicado en la propia estación.

Los viajeros contarán también con la posibilidad de utilizar los canales propios de venta de billetes de la compañía: renfe.com, la app Renfe Ticket, compra telefónica y la compra a través de los interventores una vez que el viajero esté ya a bordo de los trenes. Además, recientemente Renfe ha firmado un convenio con Correos para la venta en todas sus oficinas de billetes de trenes Ave, Avant y media y larga distancia convencional.

CGT: “criterios mercantilistas de dudosa rentabilidad”

El sindicato CGT denuncia que “el abandono de más de medio millón de potenciales usuarios que pagan impuestos para el mantenimiento de todo tipo de servicios públicos no tiene justificación” y asegura que en algunas de las estaciones afectadas “la recaudación supera con creces los gastos que conlleva el mantenimiento de estos servicios”.

“Una vez más, desde CGT venimos a denunciar la aplicación de criterios mercantilistas de dudosa rentabilidad, que sirven para cuadrar los números contables pero que sumergen en el abandono a miles de ciudadanos, profundizando en la ampliación de lo que conocemos como la ”España Vaciada“, afirman.

Según este sindicato, la medida tendrá implicaciones en la reducción de puestos de trabajo (un extremo negado por Adif), mientras que los usuarios más perjudicados “van a ser aquellos que por edad o por economía, no pueden acceder a los sistemas de venta a los que las empresas quieren desviar a estos usuarios”.

Sobre el hecho de que el billete se pueda comprar en los propios vagones, remarcan que “son cientos de trenes al día los que carecen de interventor, resultando que el viajero puede llegar a destino sin haber abonado el precio del billete”. Al respecto, recuerdan que en caso de accidente del tren o del propio viajero, el Seguro Obligatorio de Viajeros (SOV) no cubre a los viajeros accidentados que no estén en posesión de su título de transporte.

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