Fallece Julen Madariaga, uno de los fundadores de ETA

Julen Madariaga, uno de los fundadores de ETA, ha fallecido este martes a los 88 años de edad, tras varios años enfermo. Estuvo dos años en prisión, condenado por pertenecer a la banda terrorista, y, a su salida, se mostró partidario de que abandonara las armas y aseguró que había perdido la lucha por la autodeterminación. A comienzos de los 2000, ya firme defensor de la paz, se adscribió a Aralar, escisión pacifista de la izquierda abertzale fundada por Patxi Zabaleta y ahora integrada en EH Bildu.

Nacido en 1932 e hijo de un miembro del PNV, partió hacia el exilio en Chile al final de la Guerra Civil. Regresó luego a Bilbao, donde fundó Ekin, la organización que, tras separarse de las juventudes de la formación 'jeltzale', daría lugar a ETA. Fue también uno de los impulsores de Herri Batasuna, en cuyas filas militó hasta 1995. El asesinato de Gregorio Ordóñez, dirigente del Partido Popular en Gipuzkoa, y la negativa de Herri Batasuna a condenarlo lo condujeron también a alejarse de esta formación.

En 2014, con motivo de la publicación de su autobiografía, concedió una entrevista en ETB en la que desveló que había dejado ETA por la agresión física a manos de otro militante. “Nosotros nacimos y empezamos a batallar, a luchar por la liberación de nuestro pueblo. Nuestro pueblo, en determinados momentos de la historia, fue perdiendo su capacidad de decidir, su independencia. Nuestra lucha iba directamente contra el imperialismo español y contra el imperialismo francés, que son las potencias que, a sangre y a fuego, con las armas en la mano, se introdujeron en nuestro territorio”, contaba. “Me enorgullece haber creado ETA, porque era necesaria”, aseguró en otra entrevista con 'Berria'.