La portada de mañana
Acceder
Sánchez impulsa una regeneración que incluye una reforma del Poder Judicial
La fumata blanca de Sánchez: cinco días de aislamiento, pánico y disculpas al PSOE
Opinión - ¿Y ahora qué? Por Marco Schwartz

El PNV admite que hay “morbo” en Vitoria y en Gipuzkoa y que no tiene garantizada la victoria electoral

El presidente del PNV, Andoni Ortuzar, admite ya que hay “morbo” en Vitoria y en Gipuzkoa, que su partido no tiene para nada garantizada la victoria. Tan es así que incluso ha animado a sus bases a seguir la campaña el sábado, día de reflexión. En Telegram o en WhatsApp. Y como en su última visita a Donostia, en la capital vasca también ha admitido algunos errores de gestión, en concreto en materia de tráfico y movilidad. Aunque ha recalcado el “magnífico trabajo” de Gorka Urtaran ha reconocido que el transporte público era ya una “patata caliente” que en particular está azuzando el PP para recuperar el que fue su feudo. Ello explica “cambios” en el BEI, el que ha sido el proyecto estrella de la legislatura “para compatibilizar mejor su paso con otros vehículos”, y la continuidad de la circunvalación para tener “un nuevo eje de comunicación este-oeste”. “¿Hay problemas? Pues se buscan soluciones”, ha asegurado para tratar de impulsar la candidatura de Beatriz Artolazabal, la sustituta que el partido halló para poner fin al ciclo de Urtaran.

En el caso del BEI, en concreto, Artolazabal ha propuesto reducir a un solo carril en la zona de Esmaltaciones el espacio segregado para facilitar el tráfico rodado general. “Se te ve alcaldesa. Sigue así y el domingo verás los frutos de ese trabajo”, le ha dicho desde el estrado de la plaza de la Provincia Ortuzar. Y ha añadido sobre “la batalla de Gasteiz”: “Dicen que dicen que las encuestas que hay cuatro partidos disputándose la primera posición aquí [...]. Pero si uno va a los datos, a los números fríos, se da cuenta de que lo que las encuestas dicen es que el PNV es primero, que le sigue [EH] Bildu y que, a distancia, se colocan PP y PSOE. Por lo tanto, más que una pelea a cuatro, el domingo es cosa de dos. O PNV o [EH] Bildu. Ser o no ser”. Se ha convertido ya en un clásico de los mítines del PNV la crítica feroz a la coalición abertzale.

De hecho, ha traído a Álava los argumentos que en la jornada anterior empleó en Gipuzkoa, donde sí ha gobernado EH Bildu de 2011 a 2015. “¿Qué dicen los hechos de [EH] Bildu, por ejemplo? Los hechos dicen que gobernaron la Diputación de Gipuzkoa y dejaron el territorio lleno de problemas. Las basuras en las calles, las residencias, el transporte público, la convivencia, ... Cosa que tocaron, cosa que rompieron. ¡Vaya manitas! Son los Pepe Gotera y Otilio de la política vasca [...] La sociedad les echó porque no saben gobernar. Les echaron por malos. [...]. Dejaron Gipuzkoa al borde de la quiebra. Por eso ni Gipuzkoa ni ningún otro lugar pueden volver a manos de [EH] Bildu. Porque con [EH] Bildu vuelven los problemas, vuelve el lío, vuelve la bronca”, ha aseverado.

Y ha querido redondear su crítica a la izquierda abertzale con el homenaje a uno de los asistentes al mitin, Juan María Atutxa. Exconsejero de Interior y expresidente del Parlamento Vasco, ha sido el gran referente del PNV amenazado por ETA, con varios intentos de asesinato. “La diferencia entre ellos y nosotros es Juan Mari Atutxa”, ha señalado antes de que los presentes ovacionaran al veterano peneuvista. Con todo, por si acaso, ha atacado también a socialistas y 'populares', de los que ha recordado la “pesadilla” de la legislatura de Patxi López de 2009 a 2012. Y ha sacado a relucir también la etapa de Javier Maroto en Vitoria aunque ahora prefiere “el ponche segoviano al Goxua de Sosoaga”. “Y Ayuso nos llama racistas a nosotros”, ha ironizado en referencia a la campaña del exalcalde para endurecer el acceso de los extranjeros a las ayudas sociales.

El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha convertido ya en un clásico de la campaña su “no es lo mismo votar que no votar”. Cree que no ir a las urnas beneficiará a EH Bildu. De ellos ha dicho que son el “contrapoder”, el “enfrentamiento”, la “pancarta”, el “ordeno y mando” del pasado aunque “ahora disfrazado de una imagen limpia”. Y ha recordado el caso de Sara Majarenas conocido este jueves, una “exetarra en una lista” que “no habiendo liquidado su condena de inhabilitación” era candidata en Astigarraga. “Es cuestión de respeto a las víctimas y a la sociedad vasca. Es cuestión de una mínima base ética y de respeto a la dignidad de las personas y de nuestro país. Respeto, compromiso ético, convivencia”, ha clamado Urkullu, que también ha dedicado parte de su intervención a explicar los “hechos” de su Gobierno en Vitoria, a la que ha llamado “capital” de Euskadi. “Gestión eficaz”, ha sintetizado.

Antes de los máximos exponentes del PNV a nivel orgánico e institucional han tomado la palabra los candidatos Beatriz Artolazabal y Ramiro González. La primera ha asegurado representar al “verde esperanza, verde estabilidad, verde tranquilidad” frente a los que les gusta el negro, “que es la ausencia de color, peligro y oscuridad”. Era también una probable referencia a EH Bildu. También ha criticado las “amenazas, insultos o el acoso” sufridas durante la campaña. Y ha finalizado con un alegato: “Yo no voy a fallar a Vitoria-Gasteiz”. González, diputado general desde 2015 y candidato a la reelección, también ha mirado a EH Bildu. “Siempre dicen que no. Son los de siempre”, ha señalado. Con todo, ha enumerado algunos proyectos y propuestas, también económicas y sociales. “Nos apasiona Álava”, ha señalado. Y, además, ha reivindicado la integración del enclave de Treviño, perteneciente a Burgos pero ubicado en pleno corazón alavés.

El PNV ha celebrado el que será su último gran acto en Vitoria en la campaña en la plaza de la Provincia, sede de la Diputación, lo mismo que la arrancaron junto al Ayuntamiento. Decenas de cargos y simpatizantes se han quedado de pie porque las sillas dispuestas se han quedado cortas. “Os pedí movilización hace quince días y la hemos tenido. Eskerrik asko! Hoy vengo a pediros un último esfuerzo, el último golpe de riñón, la pedalada más fuerte, el sprint final hasta el domingo. Domingo incluido. Hay que seguir a tope. ¡Campaña hasta el último momento!”, ha clamado Ortuzar. Y ha añadido: “Dice la ley que los partidos el sábado no podemos hacer campaña. Pero vosotros sí. WhatsApp, Messenger, Telegram, lo que sea. Por favor. A trabajar a tope. ¡A tope!”.