Una operación conjunta de la Policía Nacional y la DEA estadounidense ha permitido detener a 14 narcotraficantes tras intervenir un alijo de 3650 kilos de cocaína llegado a las costas de Galicia en un narcosubmarino. El dispositivo de vigilancia permitió interceptar una de las lanchas que llevaron la droga a tierre mientras el resto de la mercancía se encontró a la mañana siguiente, en una playa de A Coruña, escondida bajo una lona.
Según ha informado la Policía Nacional, en la Operación Saona se realizaron 18 registros en las comarcas de Barbanza (A Coruña) y O Salnés (Pontevedra), en los que se intervinieron 54.680 euros, dos embarcaciones, cinco vehículos o un remolque, entre otros efectos. Doce de los detenidos han ingresado en prisión como presuntos responsables de los delitos de tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal. Entre ellos destacan los tres tripulantes del narcosubmarino, que intentaron huir haciéndose pasar por peregrinos.
La investigación se inició el pasado mes de agosto, cuando las fuerzas policiales detectaron una posible organización criminal dedicada al transporte de cocaína a gran escala, asentada en la localidad coruñesa de Outes. Con posterioridad, identificaron embarcaciones preparadas para dar servicio al narcotráfico, a las que les habían instalado “motores de gran potencia y última generación para dotarlas no solo de gran capacidad de carga sino también de agilidad y alta velocidad”.
El pasado día 13, tras detectar cómo esas lanchas zarpaban del puerto de O Freixo (Outes), los agentes establecieron un dispositivo terrestre de vigilancia a lo largo de la costa norte de la ría de Arousa para tratar de localizar e interceptar los vehículos que, según sospechaban, trasladarían la droga tras recogerla en la playa. Esa madrugada, descubrieron coches que procedían del arenal de Niñeiriños (A Pobra do Caramiñal) con fardos “utilizados habitualmente para el almacenamiento de cocaína”.
En la persecución, uno de los autos volcó con su carga. El resto del alijo fue localizado por la policía local de A Pobra oculta bajo una lona en la propia playa. Por su parte, los tres tripulantes del narcosubmarino simularon ser peregrinos para tratar de burlar el cerco. Huyeron a bordo de un taxi, con las ropas aún empapadas, hasta que fueron localizados y detenidos por la misma policía local.
La Policía Nacional informa de que, gracias a la colaboración del Servicio de Guardacostas de la Xunta de Galicia, se obtuvieron “inidicios” de un naufragio o hundimiento a pocas millas mar adentro. “Se trata, por tanto, de la primera investigación policial en la que se consigue la detención de los tripulantes que habían llegado a las costas a bordo del narcosubmarino que transportaba la droga”, afirma el comunicado.