La primera condena que ya ha estudiado el Supremo aplicando la ley del “solo sí es sí” afecta a una violación en Mallorca

Alberto Pozas

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Una violación a una menor en Balears será el caso que marque el camino a los delitos sexuales tras la entrada en vigor de la ley del 'solo sí es sí'. Según ha podido avanzar elDiaro.es, el Tribunal Supremo ha estudiado esta semana la condena de 12 años impuesta por la Audiencia Provincial a un hombre que en 2014 agredió sexualmente a su sobrina menor de edad en una finca familiar de Pollença. Se trata del primer caso examinado por la sala de lo penal que incluye alegaciones de la defensa para rebajar la condena aplicando la nueva ley, en un caso en que la Fiscalía ha pedido que la pena sea confirmada.

Los hechos tuvieron lugar a lo largo de 2014. La víctima y su tío tenían una relación “casi paternal”, según dijo ella misma, y fueron a buscar caracoles en una finca familiar. Fue poco después cuando el acusado enseñó un vídeo porno a su sobrina para después agredir sexualmente a la víctima.

El caso fue archivado en un primer momento después de que la adolescente afirmara que todo había sido consentido pero el hombre fue juzgado y ella pudo contar lo que había pasado y cómo no había sido creída por su familia. La Audiencia de Palma impuso al pedófilo una condena de 12 años de prisión por un delito de agresión sexual con penetración a una menor de edad según el Código Penal de 2010 y, además, teniendo en cuenta una agravante de prevalimiento.

Este es el primer caso que estudia el Tribunal Supremo bajo el paraguas de la nueva ley porque la defensa del condenado, en las últimas semanas, presentó un escrito añadiendo esta nueva alegación. Tanto la representación legal de la víctima como la Fiscalía del Tribunal Supremo han pedido que la alegación sea rechazada y su condena confirmada, según ha sabido elDiario.es.

En el caso del Ministerio Público, la Fiscalía cree que su condena de 12 años de prisión también le habría sido impuesta con el nuevo Código Penal por un delito de agresión sexual y que, por tanto, no hay que acceder a ninguna rebaja. “Es una pena que retribuye adecuadamente la gravedad de una agresión sexual” como la que cometió sobre su propia sobrina.

La sentencia con su fallo y todos sus argumentos no se conocerá hasta dentro de un par de semanas. Una resolución que llega en plena polémica por la nueva ley impulsada por el ejecutivo central y la aplicación que hacen los jueces de Balears o Madrid, rebajando por ahora la condena de varios delincuentes sexuales al entender que el nuevo texto es más benévolo con ellos. Los jueces de La Rioja, por ejemplo, han optado por la interpretación contraria y no han bajado ninguna condena.

El Ejecutivo ha fiado a la doctrina del Supremo la decisión de si deben introducir algún cambio en la norma. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, afirmó hace unos días que tomarían una decisión una vez los tribunales españoles establecieran y unificaran su jurisprudencia. Desde Igualdad defienden que la Ley no necesita ningún cambio y que existe un problema generalizado de aplicación por parte de los jueces.