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ENTREVISTA

António Guterres, sobre la crisis climática: “Nos aproximamos a un punto sin retorno”

En la imagen, el secretario general de la ONU, António Guterres.

Oliver Milman

@olliemilman —

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Los países ricos se arriesgan a dejar pasar una “oportunidad imperdonable” al no salir de la pandemia de la COVID-19 con economías más verdes para enfrentar a la crisis climática, advirtió el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas.

Antes de encontrarse en la cumbre del G7 en Gran Bretaña con los líderes de las mayores potencias económicas del mundo, António Guterres ha dicho que está preocupado porque las naciones más ricas han invertido muchos millones de dólares más en la producción de combustibles fósiles que en fuentes de energía limpia desde el comienzo de la pandemia, a pesar de haber prometido una recuperación más verde.

“Estoy más que decepcionado, estoy preocupado por las consecuencias,” le ha dicho Guterres a The Guardian en la sede central de la ONU, en la serie de entrevistas que forman parte del evento Covering Climate Now, junto a NBC News y El País. “Debemos asegurarnos de poder revertir estas tendencias, de no sostenerlas. Ahora está claro que nos aproximamos a un punto sin retorno”.

“Gastar trillones de dólares y no aprovechar esta ocasión para revertir las tendencias e invertir masivamente en la economía verde significará perder una oportunidad imperdonable”.

Un análisis reciente ha mostrado que los países del G7 –el Reino Unido, EEUU, Canadá, Italia, Francia, Alemania y Japón– han invertido $189 mil millones para apoyar la extracción de petróleo, carbón y gas, y han ofrecido salvavidas financieros a los sectores aeronáutico y automotriz desde el brote de la COVID. Esto supera en más de $40 mil millones a lo destinado a la energía renovable.

Varios líderes, incluyendo al primer ministro británico, Boris Johnson, y la canciller alemana Angela Merkel, han acentuado la necesidad de que la crisis climática sea un tema central en la recuperación posterior a la COVID-19, mientras que en muchas ciudades alrededor del mundo los ciclistas y peatones son invitados a transitar calles antes dominadas por los autos.

Pero mientras los países del G7 han acordado cortar el financiamiento internacional a la extracción de carbón, los países más ricos del mundo han entregado miles de millones de dólares para el desarrollo de pozos de gas, otro combustible fósil, en el sur global a una tasa cuatro veces superior a la del apoyo financiero para proyectos de energía eólica o solar. Mientras las economías empiezan a reabrirse, se espera que las emisiones de gases invernaderos den su segundo mayor salto en la historia en 2021, según la Agencia Internacional de Energía.

Guterres ha dicho que celebra el compromiso del G7 en tanto que “muchos países todavía son adictos al carbón”, y que es necesario hacer mucho más en un año decisivo que verá su culminación en conferencias cruciales de la ONU sobre el cambio climático en Escocia este noviembre.

“Necesitamos abolir los subsidios a los combustibles fósiles, esta es la cuestión central”, ha dicho. “Tenemos que considerar los costos reales que existen en la economía, lo que significa ponerle un precio a [las emisiones de] carbono. Si no hacemos esto, muchas de las inversiones puestas en los combustibles fósiles en la fase de recuperación obviamente no serán rentables. Serán activos varados sin futuro”.

Una prioridad clave para el secretario general de la ONU en la cumbre del G7 será ejercer presión sobre los líderes por el polémico aspecto financiero del cambio climático. Como parte del hito del acuerdo de París en 2015, los países ricos habían acordado contribuir con $100 mil millones por año a los países en vías de desarrollo para ayudarlos a adaptarse a los daños que causen las inundaciones, las sequías, las olas de calor y otros impactos de la crisis climática.

La totalidad de esa suma nunca fue entregada, y Guterres dice que será “imposible” lidiar efectivamente contra la crisis climática sin asistir a los países más pobres. Ha dicho que el G7 necesita entregar el dinero para “reconstruir la confianza” con los países en vías de desarrollo.

“Los $100 mil millones son esenciales”, ha dicho el secretario general. “La acción climática hasta ahora ha estado enfocada en mitigar, en reducir emisiones. Pero los países en vías de desarrollo tienen enormes problemas para adaptarse a los impactos existentes del cambio climático”.

Guterres ha dicho que guarda la esperanza de que Joe Biden empuje a otros países a cumplir con los compromisos asumidos para la asistencia financiera ante el cambio climático, con la reintegración de los EEUU a la diplomacia climática internacional tras la presidencia de Donald Trump.

Pero los EEUU tienen que “ponerse al día”, dijo Saleemul Huq, director del Centro Internacional para el Cambio Climático y el Desarrollo en Bangladesh. “Biden no tendrá carta blanca porque es verdad que fueron los EEUU quienes causaron el daño. Si no logra cumplir con el resto del mundo, será su problema y regresará a por ellos”.

Los científicos han advertido recientemente de que el mundo podría superar, aunque sea temporalmente, el límite de 1,5ºC en el aumento de las temperaturas medias establecido en el acuerdo de París para los próximos cinco años. Guterres, sin embargo, ha dicho que es “no solamente posible, sino necesario” apuntar a evitar el calentamiento global más allá de este límite, después del cual se esperan impactos climáticos desastrosos.

“Todavía tenemos tiempo, pero estamos al borde”, dijo. “Cuando estás al borde de un abismo, debes asegurarte de que tu próximo paso sea en la dirección correcta”.

Traducción de Ignacio Rial-Schies

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