La fiscal general de Ucrania, Iryna Venediktova, ha anunciado la apertura de una investigación por crímenes de guerra contra Rusia por el supuesto traslado forzoso de residentes de la asediada ciudad de Mariúpol.
Venediktova ha afirmado, a través de su cuenta de Twitter, que bajo el pretexto de la evacuación el Ejército ruso está trasladando a residentes a territorio ruso y despojándoles de sus pasaportes.
El consejo municipal de Mariúpol denunció el domingo por la noche, a través de su cuenta en Telegram, que algunos habitantes del distrito de Levoberezhny habían sido “deportados ilegalmente a territorio enemigo” y transportados a Rusia o a territorios ocupados por Moscú.
“A las personas deportadas les quitan su pasaporte ucraniano y le dan un papel que no tiene ninguna validez legal y no es reconocido por el mundo civilizado”, agregaron las autoridades de la ciudad.
Según la misma fuente, “miles” de residentes, en su mayoría mujeres y niños que se resguardaban de los combates, han sido trasladados por la fuerza en la última semana a “centros de filtración”, en los que son revisados los teléfonos móviles y documentos de los adultos.
“Tras la inspección, algunos de los residentes de Mariúpol fueron transferidos a ciudades distantes de Rusia, mientras que el destino de otros es desconocido,” afirmó el Consejo, que comparó la situación con las deportaciones realizadas por los nazis durante la Segunda Guerra Mundial.
Informa EFE.