225 kilómetros en poco más de 9 horas: así es el Ironman que bate récords en La Rioja

Quería batir el récord de La Rioja y lo ha conseguido. Se llama Borja Langarica tiene 28 años y el pasado fin de semana fue uno de los 3.000 atletas que participó en el Ironman de Barcelona.

“Es el tercer Ironman que corro. Este año me decidí a participar para ver si podía batir el récord de La Rioja y lo conseguí”. Y es que este joven logroñés de 28 años logró hacer los 3,8 kilómetros nadando, los 180 kilómetros en bici y los 42 kilómetros a pie en 9 horas y 27 minutos. “Hasta ahora el récord lo tenía mi compañero Sergio Villarejo que lo batió hace unas semanas consiguiendo un tiempo de 9 horas y 37 minutos”, se lo puso difícil, reconoce, pero Langarica logró mejorarlo este fin de semana en Barcelona. De hecho de los 3.000 deportistas, Langarica quedó en el puesto 113.

“Estoy contento pero sigo magullado”

“Estoy contento pero sigo magullado”, confiesa a Rioja2. “El pasado domingo fue un día peculiar porque el mar estaba embravecido y la carrera en bicicleta también fue dura porque llovió y hacía mucho viento”, por lo que las inclemencias del tiempo endurecieron aún más esta carrera. Una prueba para la que se necesita mucho esfuerzo, dedicación y fuerza de voluntad. Y es que, tal y como reconoce, “para preparar una prueba de este tipo hay que robarle tiempo a la familia, al tiempo libre... hay que sacar tiempo de donde sea” hasta conseguir unas 16 horas por semana para entrenar, eso sí, “en función de las competiciones”.

La Rioja es la única comunidad que no tiene Federación Autonómica

Pero además de Ironman, Borja Langarica es entrenador entrenador, tiene un gimnasio y es uno de los impulsores del Club Triatlón Tritones Rioja. Un club que centra la atención en su escuela, enseñando y formando a niños a partir de los 6 años de edad, sin descuidar al grupo de triatletas absolutos.

Actualmente ya son 20 alumnos en la escuela y 22 absolutos, por lo que se superan las expectativas iniciales de los fundadores del Club (Raúl Adán, Borja Langarica y Julián Marín), “tres más que conocidos triatletas que después de mucho trabajo han conseguido echar a andar este proyecto tan ambicioso y necesario en la comunidad de La Rioja ya que no existían ni escuelas de triatlón ni licencias de menores en CCAA”, recuerda Langarica.

De esta forma la Escuela Tritones centra sus entrenamientos de natación en las piscinas de Villamediana de Iregua y los de carrera a pie y bicicleta en el colegio de la misma localidad, también cuentan con las instalaciones de Prado Salobre para la práctica de bici y carrera. Pero Langarica quiere ir más allá. Y, por esta razón, uno de sus objetivos es conseguir que en La Rioja se cree la Federación Riojana de Triatlón. “Somos la única comunidad de toda España que no tiene Federación, hasta Ceuta y Melilla tienen”. Ahora, cuenta, “funcionamos como una Federación pero no la tenemos constituída”.

Y eso implica que “no podamos, por ejemplo, utilizar las instalaciones del Adarraga para entrenar, los vestuarios para cambiarnos y que no podamos optar a ninguan subvención o beca”. La promesa de constituir la Federación está hecha. “Cada año en la Gala del Deporte Riojano el político de turno nos dice lo mismo pero aquí, seguimos, sin Federación Riojana de Triatlón”, asegura.

Pero además de luchar por la constitución de la Federación Riojana de Triatlón, Langarica tiene como reto ascender a Segunda División en duatlón y triatlón. “Queremos que el Club esté entre los mejores 30 de toda españa” un reto para el que asegura, “pondremos toda la carne en el asador”.