240 millones de árboles en los bosques riojanos
Los bosques riojanos son amplios, maduros, poblados y tienen, en total, unos 240 millones de árboles, de los que la mitad disponen de un diámetro que supera los 18 centímetros, según la información facilitada a EFE por la Dirección General de Medio Natural.
El 60% del territorio de La Rioja es superficie forestal, unas 301.476 hectáreas, lo que supone que una de cada tres hectáreas de suelo riojano está ocupada por bosques; mientras que el monte arbolado en la región, hace treinta años, era una quinta parte de la superficie de la comunidad.
La Dirección General entiende que el incremento en el tamaño de los árboles refleja que los bosques riojanos son cada vez más “maduros”, lo que les confiere un valor adicional desde el punto de vista ecológico al proporcionar más sombra, producir más humedad, sujetar mejor la tierra, absorber mayor cantidad de CO2 y tener mayor capacidad para albergar fauna.
Estos datos indican que los bosques riojanos “recuperan” terreno, de acuerdo con el III Inventario Forestal Nacional, referido al período comprendido entre 1997 y 2006.
La Dirección General de Medio Natural insiste en que la gestión forestal que practica desde hace unos años, junto al descenso de la presión agrícola y ganadera, sobre todo en la sierra, permite que La Rioja tenga más bosques, que éstos tengan más árboles y que los árboles sean cada vez de mayor tamaño.
Su información indica que, del total de la superficie forestal riojana, 169.552 hectáreas corresponden a formaciones arboladas, incluidas las zonas de matorral con arbolado ralo y disperso.
Los bosques de La Rioja se caracterizan por ser más poblados y de composición más rica y variada, debido a la mejora de las especies dominantes, como encinas, hayas, robles y pinos silvestres; y a que el aumento de superficie y árboles beneficia también a otras especies que los acompañan, como arces, acebos, serbales y fresnos, lo que potencia la biodiversidad.
Las masas arboladas que mayor superficie ocupan son los pinares de pino silvestre, rebollares y hayedos y, entre las tres, suponen algo más de la mitad de la superficie arbolada.
En general, las especies frondosas autóctonas son las protagonistas de los bosques riojanos y ocupan el 61,7% de la superficie arbolada, por lo que los hayedos, los robledales y los encinares son los de mayor presencia; mientras que en el grupo de coníferas, el pino silvestre es la especie dominante al ocupar unas 23.000 hectáreas.
La Dirección General cree que una de las principales razones del “buen” momento por el que atraviesan las masas forestales en La Rioja reside en la “elevada” proporción de superficie arbolada que gestiona directamente la Administración autonómica.
Del total de la superficie forestal, unas 200.000 hectáreas son públicas, la mayoría integradas en el Catálogo de Montes de Utilidad Pública; frente a las 101.680 que se encuentran en manos privadas.
Esta situación “potencia” la conservación del medio natural, ya que la declaración de utilidad pública garantiza la adecuada protección de los montes y permite a sus propietarios acogerse a los beneficios de la Ley de Protección y Desarrollo del Patrimonio Forestal de La Rioja.
Las repoblaciones forestales han permitido incrementar para el bosque algo más de la cuarta parte de la superficie arbolada y, según la Dirección General, el cuarenta por ciento de la superficie arbolada riojana corresponde a masas repobladas.
El año pasado se repoblaron 1.068 hectáreas en La Rioja y, como media, en cada hectárea se plantan 1.200 árboles y, en el caso de los chopos, la media es de 280 por hectárea.
Las especies más utilizadas en las repoblaciones son las coníferas -pino silvestre, pino laricio y pino carrasco como las más comunes-, otras frondosas -hayas, sabinas, abedules y cerezos-, quercíneas -encina, roble y quejigo- y chopos
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