Buitres contaminados con antibióticos
Un equipo del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha descubierto en tres especies de buitres salvajes (el buitre leonado, el buitre negro y el alimoche) altas concentraciones de antibióticos en sangre.
El impacto de estos fármacos en la salud de las aves carroñeras podría constituir uno de los factores causantes de la regresión de las poblaciones de buitres en España, principal área de distribución de las aves necrófagas en Europa.
El equipo científico confirmó, según el trabajo publicado en el último número de la revista PLoS ONE, la presencia de altas concentraciones de antibióticos en sangre en el 12% de 50 ejemplares de buitre leonado, en el 57% de 49 individuos de buitre negro, y en el 40% de los 25 alimoches analizados para el trabajo, todos ellos muestreados en sus nidos de Segovia y Madrid.
El investigador del CSIC que dirige el estudio, Guillermo Blanco, que trabaja en el Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (centro mixto del CSIC, la Universidad de Castilla-La Mancha y la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha), en Ciudad Real, explica: “Para intentar demostrar el posible impacto de los antibióticos en la salud de los buitres, y, por lo tanto, en el estado de sus poblaciones, realizamos, en primer lugar, un muestreo de la presencia de antibióticos en cadáveres de cerdos dispuestos en los muladares. Este muestreo confirmó la presencia de antibióticos en los cadáveres procedentes de ganadería intensiva y disponibles para los buitres”.
Los análisis realizados, mediante Cromatografía Líquida de Alta Resolución, (HPLC, por sus siglas en inglés) y técnicas microbiológicas, confirmaron la presencia de los cuatro antibióticos buscados, enrofloxacina, ciprofloxacina, amoxicilina y oxitetraciclina, aunque las mayores prevalencias y concentraciones se encontraron con las quinolonas, antibióticos sintéticos.
El consumo de antibióticos presentes en los cadáveres de ganado intensivo afecta a la salud de los buitres, debido a su toxicidad y a sus efectos inmunodepresores.
Desde la llamada crisis de las vacas locas, con las nuevas normativas europeas, la mayoría del alimento disponible para las aves carroñeras está constituido por restos de ganado estabulado de producción intensiva, al que se suministran grandes cantidades de drogas veterinarias, en especial antibióticos (antimicriobianos), para el tratamiento de enfermedades que pueden causar pérdidas económicas.
“Los efectos de los antibióticos hallados en la salud de las aves carroñeras se parecen a los que se presentan en condiciones de uso inadecuado de estos medicamentos en humanos, como la alteración de la flora normal y la adquisición de patógenos como hongos y bacterias”, explica Blanco.
La presencia de antibióticos en sangre en las tres especies de buitres está relacionada de forma clara, según las conclusiones del estudio, con la infección por patógenos oportunistas, como hongos (Candida albicans, Aspergillus fumigatus) y bacterias causantes de enfermedades graves, como la salmonelosis (Salmonella sp.) o la tuberculosis (Mycobacterium avium).
EL BUITRE NEGRO
De las tres especies estudiadas, el buitre negro es el más afectado. “El examen de buitres negros encontrados en un pésimo estado de salud en el campo, y que ingresaron después en centros de recuperación, confirmó la infección por patógenos oportunistas asociada a la presencia de antibióticos circulantes”, señala el investigador del CSIC.
La necropsia de otros ejemplares de buitre negro encontrados muertos confirmó también la presencia de antibióticos en el hígado y lesiones en el riñón y en el hígado, así como la degeneración de los órganos del sistema inmune. Para Blanco, “todo esto indica la existencia de una relación directa entre la presencia de antibióticos y la mortalidad asociada a su toxicidad o a sus efectos inmunodepresores, que permiten la adquisición y proliferación de patógenos”.
“En los últimos años, debido al impacto que provocan en las poblaciones de buitres los cambios en las actividades ganaderas, así como a la persecución
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