El Steaua, un rival propicio para sellar los octavos

El Sevilla quiere sentenciar este miércoles (20.45 horas) en Rumanía su pase a la siguiente ronda de la Liga de Campeones ante el Steaua de Bucarest, que se juega literalmente la supervivencia en este Grupo H de la máxima competición continental, en el que marcha último, tras perder los tres partidos disputados hasta el momento. Bien distinta es la situación de los nervionenses, que son segundos, con 6 puntos, por detrás del líder, el Arsenal, que tiene 9 puntos, mientras que el Slavia de Praga es tercero, con 3 puntos. De hecho, el ahora equipo de Manuel Jiménez ya venció a los rumanos hace dos semanas en casa por 2-1, en el que fue el último partido de Juande Ramos al frente del banquillo blanquirrojo.

En aquel encuentro la superioridad hispalense fue tal que el equipo se dejó ir en la segunda mitad, y a punto estuvo de dejarse empatar. Sin embargo, los rumanos no saben aún lo que es ganarle al Sevilla, que ya les derrotó por partida doble en febrero de este mismo año en dieciseisavos de final de la Copa de la UEFA, con triunfo incluido en Bucarest por 0-2 con tantos de Poulsen y Kanouté. Para el Sevilla el principal problema viene de las bajas que se le acumulan, con Javi Navarro, Escudé, Fazio, Crespo, Maresca y Duda lesionados. Con especial incidencia en la defensa, estas bajas han obligado a la entrada en convocatoria del canterano Lolo, que tiene posibilidades incluso de ser titular en el eje de la zaga junto a Mosquera, con Dragutinovic en la zurda. Otra posibilidad sería la de situar a Adriano en esta última posición, mientras que Dragutinovic sería central.

También se quedan fuera de la lista, por decisión técnica, el delantero Kerzhakov y su compañero de demarcación Chevantón, que no está inscrito para jugar en competiciones europeas. Sin embargo, lo lógico es que el Sevilla no pase apuros para imponerse mañana en el Steaua Stadium, donde se espera una temperatura mínima en torno a los dos grados bajo cero, y que los compromisos siguientes ante Slavia y Arsenal no sean más que meros trámites. En cuanto al Steaua, sigue sin levantar cabeza tanto en Europa como en su torneo doméstico, en el que marcha séptimo y viene de perder por 2-0 ante la Politécnica de Timisoara. La llegada, pues, al banquillo de Marius Lacatus no ha logrado revitalizar a un plantel lleno de limitaciones, que resultan muy difíciles de solventar tan sólo mediante la casta. Así las cosas, y a pesar de que los azulgranas no tienen margen de error, y saben que sólo les vale la victoria, el triunfo local se podría calificar de auténtica sorpresa.